No me puedo resistir a enseñarte a preparar esta original y llamativa receta de salmón marinado con cítricos, hierbas aromáticas, jengibre y remolacha. Es una fabulosa opción que puedes preparar y conservar en el frigorífico durante días y así disfrutar en cualquier momento.
Además ahora los días son más largos y soleados, y seguro que en más de una ocasión te vas a ver en casa rodeada de familia o amigos, y sorprenderles con este colorido plato, rápido, fácil y mucho más rico, va a ser todo un acierto.
Eso sí, ya sabes que las patatas no las puedes dejar preparadas y las tendrás que hornear justo antes de comerlas, pero serán el acompañamiento perfecto para este salmón marinado.
¿Quieres saber como hacerlo? Pues vente conmigo que en este paso a paso te lo cuento todo.
Receta: Salmón marinado con remolacha, cítricos y jengibre.
2 lomos grandes de salmon sin espinas, eneldo fresco, 1 remolacha rallada, el zumo de un limón y su ralladura, ralladura de ½ naranja, sal, 1 diente de ajo, pimienta, jengibre y medio vaso de aceite de oliva.
Para las patatas asadas:
4 patatas rojas, 1 cebolla roja, 5 dientes de ajo, hojas frescas de romero, hojas frescas de tomillo, sal, pimienta y un generoso cordón aceite de oliva.
En un gran bol vierte el aceite de oliva, la remolacha rallada, el eneldo partido, el zumo del limón con su ralladura, la ralladura de la piel de una naranja, el diente de ajo prensado, el jengibre rallado al gusto, sal y pimienta. Mezcla con unas varillas y sumerge en este delicioso adobo el salmón.
Cubre con papel film y conservar en el frigorífico durante 3 – 4 horas.
Para acompañar a este delicioso salmón nada mejor que preparar unas tiernas y aromáticas patatas al horno.
En una fuente pon las patatas cortadas en gajos, la cebolla roja en pétalos, unos dientes de ajo enteros y otros prensados, unas frescas hojas de romero y tomillo esparcidas, sal y pimienta al gusto, un cordón de aceite de oliva y 2 cucharadas de agua. Mezcla con las manos y al horno 6o minutos a 180º.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.
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