Daniel Pinteño y Carlos Mena recuperan la música sacra de Antonio Literes.

Antonio Literes y Carrión, nacido en 1673 en la localidad mallorquina de Artá, fue uno de los compositores españoles más importantes del siglo XVIII. Hacia 1686 ingresó en el Real Colegio de Niños Cantores de la capital, donde ejerció posteriormente como maestro de música interino. En 1709, ya músico de violón de la Real Capilla de Madrid, se encargó junto a José de Torres de la composición de la música de la institución hasta su muerte en 1747.

La música sacra de Literes no solo sonó en espacios como la Real Capilla o los reales monasterios de Madrid, sino que se difundió por toda la monarquía hispánica, tanto en la península ibérica como en los territorios americanos. Es precisamente en el Archivo Histórico Arquidiocesano de la catedral de Guatemala donde se ha conservado gran parte su obra así como las últimas interpretaciones sacras, algunas de ellas fechadas en las últimas décadas del siglo XVIII.

El proceso de recuperación de la obra musical de Antonio Literes es relativamente reciente. Aunque algunas de sus composiciones formaron parte de varias antologías de música española del siglo XX, el rescate efectivo de su música se inició en la década de los 90. Entonces se grabaron las zarzuelas Acis y Galatea y Júpiter y Semele (ca. 1713); la comedia mitológica Júpiter y Danae (1700) y la Ópera armónica al estilo italiano (ca. 1710), conocida hoy como Los elementos. Sin embargo, una parte importante de su legado musical, las cantadas a solo de temática sacra, han permanecido inéditas durante siglos.

El sello 1700 Classics —con el patrocinio de la Fundación BBVA— recupera las cuatro cantadas al Santísimo para alto de Literes, con la voz del contratenor Carlos Mena y el conjunto Concerto 1700, dirigidos todos ellos por Daniel Pinteño. Las cantadas, compuestas entre 1720 y 1730, adoptan el estilo italiano dominante en la época con tintes hispánicos. Alegorías y bucolismo impregnan las notas de estas composiciones profundas y dulces que incluyen elementos propios del estilo español como coplas y graves cultivados sobre todo durante las primeras décadas del siglo XVIII. Las cuatro cantadas al Santísimo para Alto incluidas en el disco destilan un tremendo virtuosismo vocal e instrumental complejo y armónico.

Junto a Carlos Mena y Daniel Pinteño han trabajado en el disco los miembros de Concerto 1700 Pablo Zapico, guitarra barroca y tiorba, Jacobo Díaz, oboe, Ignacio Prego, clave y órgano, Ester Domingo, violonchelo, Pablo Prieto, violín, Ismael Campanero, contrabajo, y Ricard Casañ, trompeta.