Tragabuches, el nuevo restaurante de Dani García.

Tragabuches, en Ronda, fue el primer restaurante en el que Dani García ejerció como jefe de cocina y Tragabuches, en Marbella, es su nueva propuesta gastronómica.

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Honesto y andaluz, así define Dani García su nuevo resturante marbellí, Tragabuches, una propuesta gastronómica con la que el popular chef andaluz nos propone viajar a sus orígenes, al primer Tragabuches que fue también el primer restaurante en el que estuvo al mando de la cocina, tenía sólo 22 años y estaba en Ronda… Pero ¿cómo es este nuevo Tragabuches? Es un restaurante con cocina non stop que abre para servir el desayuno y no cierra hasta que sirve las últimas cenas, cuenta además con barra con carta propia y una zona de ludoteca para los niños.

El Trababuches marbellí es un restaurante de kilómetro cero, de cocina local y producto de cercanía como lo era el de Ronda pero ahora destila, además, la experiencia culinaria ganada por Dani García en los últimos años, esa que lo ha colocado entre los mejores chefs del mundo; el local es como la cocina, natural y sencillo, de alta calidad y acogedor a rabiar: suelos y techos de madera, ladrillos en blanco roto, colores neutro…

¿Y cómo es la carta? Dicho de otro modo ¿a qué sabe hoy Tragabuches? Sabe a chacina andaluza, a peletilla ibérica de castaña de la serranía de Ronda, a carne mechá en su jugo oloroso, a quesos autóctonos como El Bucarito o El Bosqueño, a milhojas de foie y queso de cbra de Ronca con manzana verde caramelizada (un plato del primer Tragabuches y de 1998), a salpicón de mariscos con gamba blanca, langostino y mejillón, a tartar de gamma blanca con mantequilla de oveja y caviar, a ensalada de tomate amela a la brasa con sour cream a la moruna, a puerro asado al carbón de la vega del Guadalhorce con romesco andaluca y a aguacate de relleno a la inversa de cóctail de langostinos de Sanlúcar, a tortilla de patatas sin cebolla (Dani García es sincebollista…), a arroces, guisos, sopas, carnes y pescados a la parrilla, gazpachuelo… Todo ello para comer y cenar, claro ¿y para desayunar? Bocatines y molletes, sándwiches, huevos, tostadas francesas…

Saborear

Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.

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