Después del calor que hemos pasado estas semanas y a pesar del fresquito de estos últimos días, la verdad es que estamos en verano y no tardará mucho en volver a apretar. Aquí o en la playa, o en la montaña. En todo caso venga como venga el tiempo estamos en época de descanso después de un largo curso, con todo su otoño, su invierno y su primavera, así que es el momento de tener a mano recetas sencillas, rápidas de hacer pero sabrosas y deliciosas. Y llenas de beneficios para tu salud.
Por eso Margarita nos trae esta receta hoy de riquísimos linguini a la carbonara que se preparan, a diferencia de lo que acostumbramos, con su nata, sí, pero con brócoli y rúcula. El resultado es genial y para todos los públicos, incluso para facilitar a los más pequeños el tedio de las verduras y hortalizas, porque con pasta parece que todo entra bien y con una rica carbonara mucho más. Y sólo necesitas un rato para prepararlo.
Y con la cosa de los muchos beneficios del brócoli, entre los que se encuentra que es un gran antioxidante -perfecto para el verano, para la exposición al sol- y saciante, que nos vendrá bien para no atiborrarnos si queremos conservar ese cuerpo serrano para lucir modelitos y bañadores. Y la rúcula! siempre estupenda y fantástica para para prevenir las enfermedades cardiovasculares, reforzando además nuestro sistema inmunológico, bajando el colesterol negativo y regulando el azúcar. La recula que es buena incluso para evitar las cataratas. En fin una verdura y una hortaliza que compensan sus sabores con la pasta y la salsa carbonara.
Nos lo cuenta Margarita paso a paso, en muy poquitos pasos. En lo mismo que lo puedes tener en la mesa para resolver esa comida entre playa y playa para toda la familia.
500 gramos de linguini, 1 hoja de laurel, 150 ml de leche evaporada, 75 ml de nata para cocinar, 2 cebolla, 150 gramos de beicon, 1 ramillete pequeño de brócoli, hojas de rúcula, 1 yema de huevo, queso parmesano, sal, nuez moscada, pimienta negra y aceite de oliva.
Hervir abundante agua con un poquito de sal y una hoja de laurel. Cocer los linguini hasta que estén al dente. Colar y reservar una vasito de liquido de la cocción.
Batir la yema de huevo con cinco cucharadas de agua de la cocción e incorporar junto a un poquito de nuez moscada, pimienta y sal al gusto. Remover para integrar y retirar del fuego.
Hacer pequeños ramilletes el brócoli, lavarlos y escaldar en agua hirviendo durante 30 segundos. De esta manera nos quedará una verdura crujiente con un intenso y hermoso color verde.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.
Un menú inspirado en la cultura y la gastronomía china, coctelería de autor y un espectáculo audiovisual para celebrar el Año Nuevo Chino en quintoelemento. + ver