Roomservice, la cena efímera se sirve en Ámsterdam.

Siempre es un placer escaparse a Ámsterdam. Sus canales, la vida en sus parques, el espíritu que se respira en sus calles… sencillamente, enganchan. Pero este invierno, además, tenemos una cita gastronómica que no podemos dejar pasar así como así: el Roomservice at Olof’s.

Bajo este nombre se esconde la última aventura de Chris Naylor, el chef del afamado restaurante Vermeer, con una estrella Michelín. Con él a los fogones ha abierto recientemente un restaurante pop-up; y no en cualquier lugar, sino en la capilla de San Olof, la más antigua de la capital holandesa. Lo hace de la mano de Hoteles NH, con los que ya trabaja en Vermeer. Bajo el nombre de Roomservice, el local forma parte del NH Barbizon Palace Hotel, que ha reestructurado este espacio multifuncional para convertirlo durante un tiempo limitado en meca gastronómica.

Para el interiorismo ha tomado al propio establecimiento como referente. Y es que el concepto que se ha querido transmitir a través de la decoración del restaurante ha sido el de la intimidad de una habitación de hotel donde se sirve la cena, de ahí su nombre.

En Roomservice, que estará abierto solo hasta el próximo 30 de abril, el foco de atención está en las verduras y hierbas aromáticas que tanto han marcado el menú de Taylor . Se podría incluso decir que, en sus platos, la carne y el pescado pasan a ser la guarnición (llama la atención que el NH Barbizon Palace posee su propio huerto en el tejado, incluso una colmena de abejas). Taylor a los fogones y, en la sala, el sommelier Simon Veldman, que se encargará de maridar el vino con los diferentes platos (desde un Ratatouille a Verduras de invierno con cebolla caramelizada o Pudding de arroz con sorbete de mango).

El espacio cuenta también con el primer bar de Ámsterdam dedicado a los vermús. Se ha bautizado como La Vermutería y en él también se sirven tapas típicas españolas (desde el jamón serrano de Joselito a corazones de alcachofas fritas, pasando por bonito del norte Ortiz). Después de la cena, en cambio, toca dirigirse al Fever Tree Cocktail Bar. Allí se podrá disfrutar de bebidas tanto clásicas como innovadoras.

El menú cambia cada semana, con un ticket medio de unos 40 €/comensal, dependiendo del vino escogido. Hasta abril, será la excusa perfecta para ir a Ámsterdam… ¡No te olvides llamar al servicio de habitaciones y reservar!