Pura luminosidad.

En la parte alta de la ciudad, se encuentran casas, grandes y señoriales, con jardín. De esas que parecen contar historias importantes porque posiblemente las hayan vivido. Una de ellas es ocupada por el restaurante DeLuz, un bonito lugar en el que reservar para comer o cenar, y también celebrar eventos con los que se sueña. El equipo que dirige Carlos Zamora, por estilismo y propuesta culinaria, hacen que sean de cuento. Ahora, presenta novedades.

Se trata de su ‘Carta blanca’, esto es, un menú cerrado con los platos más vanguardistas del chef Ander San Martín. Su precio es de 40 euros e incluye propuestas como el lomito de lubina con algas wakame -con claras influencias de la cocina japonesa-; “Los 3 Valles”, una degustación de la mejor ternera ecológica de Cantabria en steak tartar, ragout y a la plancha o “El Jardín de Deluz”, una mahonesa ligera con mostaza de Dijón, trufas, rosas y puerros blanqueados que hace referencia a su jardín que alberga 505 rosales. Para terminar, coca de hojaldre caramelizado con Chantilly frambuesas naturales y guirlache de almendras.

Como nuevos son los dos menús, por 22 y 30 euros, basados en la cocina tradicional de Cantabria con materias primas, claro está, locales. Todo ello en esta casa de los años 50 en la que, sospechamos, sucedieron cosas importantes. Bienvenidos los días DeLuz.