La Botica, gastronomía con receta.

Sus exquisitos platos le han otorgado a este restaurante vallisoletano una estrella Michelín.

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Antes del siglo XX, las boticas eran lugares en los que los propios boticarios formulaban y preparaban los medicamentos que los médicos recetaban. Esto fue mucho antes de que existiera la industria farmacéutica, cuando las boticas eran lugares mágicos llenos de encanto, donde uno podía encontrar la receta idónea que le curara todos los males.

En cierto modo, el restaurante La Botica de Matapozuelos, en Valladolid, sigue manteniendo esa esencia. No en el sentido medicinal, pero sí llevando el arte de lograr la mezcla perfecta a otro terreno mucho más apetecible: la gastronomía. Abrió sus puertas en mayo de 2002 y todos los comensales que han pasado por alguna de sus mesas se han ido a casa con el “remedio” que buscaban para su paladar.

La carta de La Botica está influenciada por dos generaciones de cocineros: Teodoro de la Cruz, el padre; y Miguel Ángel y Alberto de la Cruz, los hijos. Ambas conviven entre los fogones aportando a los platos dos estilos definidos que, combinados con acierto, dan un resultado delicioso. Y han sido los responsables de que el restaurante cuente con una estrella Michelín.

El municipio de Matapozuelos, acogedor, rodeado de pinares y en el corazón de la D.O. Vinos de Rueda, es el lugar perfecto para visitar un fin de semana y así aprovechar para degustar las propuestas del restaurante La Botica. El lugar que ocupa era anteriormente una antigua casa de labranza que se construyó en el año 1876, de la que mantiene algunos detalles y su distribución.

La Botica está dividida en dos estancias, un comedor pequeño en el que llama la atención el mueble original de la botica y otro salón más amplio en el cual se ve la madera y el adobe del antiguo edificio. En ellos se sirven platos a la carta o dos menús degustación a elegir, el Menú Tradición y Un paseo por el entorno, con recetas tradicionales elaboradas con ingredientes locales o recolectados por el propio restaurante y una presentación impecable.

Una amplia bodega de vinos de la zona acompaña y completa la carta. La Botica es un restaurante en el que todo el mundo encuentra un plato acorde con su paladar, porque han sido diseñados con el objetivo de deleitar.

Localización

Saborear

Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.

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