Cuando viajamos descubrimos nuevos mundos o, cuando menos, nuevas formas de mirar al nuestro; en la gastronomía descubrimos siempre un reflejo de ese modo de ser nuevo a nuestros ojos y lo degustamos para llevarnos el mejor sabor de boca en nuestro regreso a casa.
Claro que, además, hay rincones del mundo que ya sea por su dilatada tradición gastronómica o por lo mucho que difiere ésta de la nuestra, nos interesan especialmente; uno de esos rincones es París, una ciudad que atesora lo mejor de una gastronomía rica en todos los sentidos de sus menús más sencillos a su alta cocina.
París es una ciudad para vivirla con todos los sentidos, también para comérsela y eso es lo que hoy te proponemos: 5 modos de comerte París un domingo cualquiera y en un brunch -que para los franceses es un petit-déjuner y para los alemanes un früshstück-, te proponemos 5 para que elijas a placer.
Si quieres degustar un brunch delicioso que puede ser vegetariano si tú también lo eres, tendrás que visitar La Chambre aux Oiseaux y no olvides reservar con, al menos, una semana de antelación.
En Australia, y en general en todo el mundo de tradición anglosajona, el brunch de domingo es una costrumbre irrenunciable; y es precisamente esa costumbre la que Sarah y Nico traladaron de Merlburne a París. Si quieres degustar un brunch con cierto regusto australiano Holybelly es el lugar perfecto.
El brunch de L’Echappée es muy francés, su buffet está lleno de una suculenta variedad de quesos y también de dulces, de ensaladas de frutas y otros pecados capitales… En cuanto a sus platos salados, aquí también podrás decantarte por un brunch vegetariano.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.