Hoy queremos proponerte un bocado muy nuestro: jamón, el jamón curado y salado que sólo es comparable al prosciuto italiano, el resto del mundo nos mira con envidia y ganas de jamón. Claro quea, siendo como somos el país del jamón, la variedad de tipos y calidades es grande y es importante elegir bien, por eso nosotros no vamos a hablarte de un jamón cualquiera sino del más selecto, único, nuestro ibérico de bellota, de dos firmas cuyos nombres son símbolo y sinónimo de calidad: Arturo Sánchez y Señorío de Montanera.
Si hay una época y ocasión en la que no escatimamos en productos gourmet, esa es sin duda la Navidad; regamos las fiestas con los mejores vinos y trabajamos en cocina como nunca, preparando delicias que conquistarán el gusto y el paladar de nuestros comensales; el menú de la última noche del año es de gala, de la más rotunda elegancia culinaria y empieza por los aperitivos; es entre esos aperitivos donde el jamón se impone.
No necesita preparación más allá de cuidar su corte perfecto, es un bocado salado excepcional que marida de modo excepcional con el vino tinto y que encuentra en el pan un compañero perfecto de degustación.
Los jamones y paletas de Señoría de Montanera llegan desde Extremadura, una de las zonas con mayor extensión de encinar de España y lugar donde más de 60 ganaderos producen este excepcional producto que, además, puedes probar ya mismo si estás o estarás en Madrid antes del 6 de enero.
Hasta esa fecha y en el Hotel Santo Mauro, podrás degustar tanto el jamón como la paleta, 100% de bellota en ambos casos y, además, estarán en la carta del hotel maridados con Contino Reserva 2009 e Imperial Reserva 2010, respectivamente.
Arturo Sánchez es una firma que tiene bouquet, más de 100 años de historia avalan marcan tradición y avalan su saber en cuanto a todo lo que al jamón se refiere.
Para estas fiestas Arturo Sánchez propone su pack Heritage, jamón perfecta y deliciosamente cortado.
Además, según estudios recientes, se trata de un producto apto para enfermos de diabetes tipo II lo que lo convierte además en un producto a compartir que enriquece la mesa para todos tus invitados.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.
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