¿Buscas brunch de domingo para este fin de semana? Brasserie Lafayette.

Los domingos siempre saben a brunch y es que el domingo es el día en el que te levantas tarde después de haber gozado de un sábado largo e intenso, te levantas con la alegría de tener un día libre por delante y también con la pereza de saber que con él termina el fin de semana… pero ya es verano y los días son largos, incluso los domingos en los que se te pegan las sábanas lo son… Y para recuperar el tiempo dormido, nada como adelantar la comida porque, además, tendrás hambre tras saltarte el desayuno, nada pues como un brunch, un brunch de domingo como el de Brasserie Lafayette.

En Brasserie Lafayette nos ofrecen dos menús de brunch que se recrean en la cocina francesa que tan bien recrean en este restaurante madrileño: un brunch en tres pases y el brunch lux.

El primero de ellos, el brunch en tres pasos, comienza con una selección de entrantes entre los que degustarás un rico gazpacho de remolacha cubierto de virutas de Comté, un croissante relleno de salmón ahumado y aguacate con aliño de mostaza, una brocheta de piña y frambuesa con menta y chocolate y un yogurt griego con fresas en almíbar y quesos galos; entre los platos principales que se ofrecen a elegir los hay realmente suculentos: el clásico huevo Beneditct de todo brunch, el crêpe ratatoille, la burger de paté de campagne y el sádwich croque Monsieur con confit de pato trufado. ¿Postre? Mini milhoja de crème brûlée o mini  sablé de limón con tejas de merengue. Y, como todo brunch, se acompaña de zumo de naranja y café o infusión.

El precio de este brunch es de 37 euros el cubierto (8 euros más si croque Monsieur le añades el confit de pato trufado) mientras el brunch lux cuesta 59 euros el cubierto ¿a santo de qué tal diferencia? Eso es lo que vamos a contarte a continuación.

El brunch lux es un capricho de domingo como pocos, un menú cerrado con tres opciones maridadas: de entrante ostras Legris nº2 con una copa de champagne; de plato principal un croque Monsieur con confit de pato trufado y una copa de vino; de postre Ópera… la versión del chef Gustavo Valbuena del clásico dulce francés preparado con una base de crema de chocolate, mantequilla y café y decorado con crujientes de chocolate. Por supuesto este lujo de brunch francés también incluye café o infusión.