La cocina y el ambiance.
Un homenaje a la cocina que se convierte en una deliciosa experiencia sensorial.
Ambiance; léase más allá del ambiente, el tono, la calidad y calidez, el carácter de éste. Y un auténtico, cálido y sugerente ambiance de deleite de los sentidos es el que encontramos en este primer capítulo de La vida en la cocina: La receta preferida de Sara.
Ver, oler, saborear, y sobre todo vivir, son las claves de una de las experiencias sensoriales más deliciosas de cuantas hayamos disfrutado en la pantalla desde que nos asombráramos con la compulsiva y tradicional forma de cocinar del Chef Chu en Comer, Vivir, Amar, de Ang Lee o desde que la adaptación de la novela de Laura Esquivel Como Agua para Chocolate llevó al cine el paralelismo entre la cocina y la vida.
Así, reflejar en este corto la cocina como espacio vivo en el que «reír, llorar, amar, descubrir, recordar y cocinar» es el reto al que gastromedia ha sometido a Pedro Molino de ThinkMol y bajo la dirección de Cristina Molino, et voilà!. La delicadeza de la producción, la magnífica dirección y la impecable fotografía se resuelven en un «auténtico placer sensorial» en el que se alcanzan los aromas y las texturas; los sabores de cada ingrediente, durante un proceso tan natural como exquisito, cautivan por ese savoir-fair del equipo de gastromedia a los fogones y por el cautivador ambiance del corto, al que no hemos podido resistirnos.