Neotaberna Santerra, de tapas y cócteles por la calle Ponzano, en Madrid.

El Santerra es algo así como fijo en la quiniela, preguntas ¿dónde reservamos? y, si eres de los habituales del mundo gastronómico madrileño, seguro que el Santerra cruza por tu cabeza incluso por partida doble porque al restaurante que lleva ya un tiempo enamorándonos por la boca en la calle General Pardiñas se ha unido hace pocos meses su versión tabernaria: la Neotaberna Santerra en la calle Ponzano.

Una barra imponente y mesas altas con sus correspondientes taburetes protagonizan una decoración con un toque de elegancia que nos hace comprender enseguida porque el Santeerra de la calle Ponzano es una neotaberna y no una taberna a secas; su carta se mantiene en esa línea, platos típicos de las tabernas más castizas pero con ese toque magistral que sólo un chef como Miguel Carretero, junto a Alicia Moreno, sabe dar a sus platos, un punto de cocina que quienes son habituales del restaurante Santerra conocen bien y que disfrutarán más si cabe en esta nueva Neotaberna.

La base de la carta sigue siendo la cocina castiza de Madrid pero ahora con un toque internacional que la hace, si cabe, más deliciosa: las croquetas de jamón ibérico, santo y seña del Santerra, torreznos, los de toda la vida pero sobre una salsa de tomatillo verde, molleja de ternera, sí, pero con chimichurri, tirabeques salteados y boniato, un pepito de ternera de escándalo con mahonesa de pimientos asados, queso Idiazábal ahumado y piparras encurtidas, por supuesto callos a la madrileña, pluma de cerdo ibérico y escalora aliñada con vinagreta de mostaza de hierbas, el steak tartar aliñado ‘a su manera’ y un bocata de calamares tan peculiar que se llama Rejos Chili Peppers, también focaccia, anchoas del Cantábrico, salpicón de mejillones, alcachoas y embutidos con denominación de origen… ¿se puede pedir más? se puede, se puede, la carta de la Neotaberna Santerra ofrece, de hecho, más.

Y en ese ‘más’ está el postre, claro (flan de leche fresca con chantilly de haba tonka, brownie de chocolate amargo, maíz y castañas asadas u hojaldre, mantequilla y almendras) y una carta de cócteles de escándalo que no te puedes perder.