Los domingos son para vivirlos en el Limbo.

El limbo es (era) ese lugar etéreo en el que permanecían las almas de los justos cuando éstos morían sin bautizar y decimos que era porque hace cosa de un par de años el Vaticano concluyó que el limbo no era ni había sido nunca un dogma de fe y que basta la misericordia divina para que los justos lleguen al cielo aunque no estén bautizados. El caso es que, viviendo en un país de tradición católica como es el nuestro, siempre hemos pensado en el limbo como en el vacío, como un lugar ajeno al sufrimiento para también a la alegría, un lugar tranquilo, inamovible… algo así como un domingo. Y por eso nos parece de lo más adecuado irnos, hoy domingo, a comer a Limbo, un nuevo y apetecible restaurante madrileño.

Limbo es la nueva apuesta gastronómica del Grupo La Musa, un restaurante en el que mandan los platos a la brasa con el pollo asada como protagonista esencial de su carta ¿qué mejor menú par aun domingo cualquiera que un pollo asado en el Limbo?.

En lo decorativo, el interiorismo de Limbo es de lo más curioso porque, si bien su base es de diseño industrial, tiene toques de feria, fiesta y color que dan como resultado un local de lo más divertido en todos sus espacios, tanto el de su barra y su cocina abierta como en sus mesas.

¿Qué tal una cerveza fría mientras esperas tu pollo asado? ¿y si la acompañas de algunas tablas frías para compartir? ¿tal vez unas croquetas caseras de pollo y jamón para empezar? para comer, insistimos en el pollo asado aunque si prefieres una costilla de cerdo, una hamburguesa de ternera o un bocadillo de bristeck en el Limbo te lo servirán enseguida; los tomates a la brasa se nos antojan una guarnición estupenda, casi tanto como las patatas asadas o el arroz caribeño; y no se te ocurra castigarte sin postre (eso sí sería pecado), elije un flan de dulce de leche o un lemon pie con galleta, si eres de los que se muere por el chocolate prepárate: cremoso de chocolate blanco con fresas estofadas y espuma de violeta o mug cake de chocolate con helado de galletas.

¿Nos vemos en el Limbo?