¿Y por qué no? Esa es la pregunta que te haces el día en el que la afirmación ‘porque no’ deja de ser suficiente; es el día en el que te haces mayor y decides vivir a tu manera, respondiendo con una sonrisa y un brindis a cada ¿y por qué no? que se cruza en tu camino.
Y es que lo de las normas está bien siempre y cuando puedas romperlas porque si algo has aprendido a lo largo y ancho de tu vida es que son muy pocas las cosas que no se pueden cambiar y muchas las que esperan sus nuevos tiempos bajo el influjo de los nuevos modales de Ballantine’s.
Es tu momento y el de tus nuevas ideas, el de atreverte a vivir a tu manera y tus modales, modales que se acompañan de un nuevoperfect serve porque el whisky, el buen whisky, está de moda, es Ballantine’s y se sirve con ginger ale y un toque de lima y menta.
Ballantine’s, un whisky escocés de mezcla, refinado y elegante.
En la cata de ballantine’s apreciarás notas de chocolate, manzana roja, vainilla, con un cierto aroma ahumado que potencian el Ginger Ale y la esencia de jengibre. Añádele en una copa alta con boca ancha un toque de lima y menta fresca a su burbuja fina y duradera para alargar y refrescar el trago, así obtendrás el perfect serve de un Ballantine’s con una Ginger Ale.
No abras la puerta a desconocidos. Conócelos a todos.
Tu vida es un entorno en el que ostentas el derecho de admisión, claro que para poder ejercerlo tendrás que conocer primero a quien intenta saltárselo… ¿y si resulta ser alguien que quieres que se lo salte?
No hablar con extraños te convierte a ti en uno de ellos.
Dicen que el mundo se divide entre los conocidos y los extraños, todos somos un poco de las dos cosas, claro que cuando mayor sea nuestro universo conocido mayor y mejor será nuestra visión del mundo, más amplio será nuestro universo y más rica en matices nuestra vida.
Comportarse en público es la manera más aburrida de comportarse.
¿Y por qué no? nos preguntamos de nuevo… ¿por qué no hacer lo que nos venga en gana en cualquier momento, lugar y ocasión? si la respuesta a esta pregunta es un simple ‘no se debe’ es que ha llegado el momento de hacer que se deba.
No, nunca es tarde ¿qué es al fin y al cabo el tiempo más que una línea invisible en la que nos movemos en una dirección única? ¿qué importa 5 minutos antes que después? importa el qué, el quién, el por qué, el para qué… e importa siempre, nunca es tarde.
Viajar solo es menos peligroso que no hacerlo nunca.
Quien no viaja corre el riesgo de acabar pensando que su mundo es el mundo entero y que lo que cuentan por televisión es la única e incontestable realidad. Movernos y ver otras realidades es tanto como regalarnos un nuevo mundo en cada viaje.
Las mejores cosas del mundo se comen con las manos.
Con elegancia y con estilo, pero con las manos; no es un asunto de modales ni de educación sino de sentidos ¿por qué negarle al del tacto el disfrute gastronómico? basta recordar a Julia Ormond frente a Harrison Ford -Sabrina frente a Linus- sentados ambos en el suelo y comiendo con las manos, saboreando cada minuto de aquella velada desde la vista al tacto, al buen gusto, los aromas intensos y los sonidos deliciosos.
Enamorarte de alguien y casarte con él, esta bien. Hacerlo mas veces, también.
Sí al amor, sin más; si eres de los que lleva con pasión su primer sí quiero hasta el final ¡enhorabuena! de no ser así… ¿qué importa? errar es humano, también en el amor ¿a quién se le ocurriría negarse una nueva oportunidad? la vida es bella… cuando es el amor quien la dirige.
Porque cuando tú invitas cabe que incluso tú sugieras la copa, una alta de boca ancha, con la cantidad justa de whisky, ginger ale y un toque de perfect serve, lima y menta.
Sabe mejor porque es mejor, por lo que tiene de descubrimiento y por la grandeza que subyace siempre al acto de compartir.
Los jueves afterwork, cena los viernes y fiesta los sábados, los domingos triste merienda de churros y chocolate ¿y el lunes? ¿y el martes? ¿y el miércoles? ¿días perdidos? ¿arrasados por la nada de la historia interminable? ¡nos negamos!
Los días son para vivirlos todos, para disfrutarlos, catarlos y degustarlos y para sacale a todos y cada uno un momento para compartir.
Dejar un buen trabajo para hacer lo que siempre has querido es la única manera de ascender.
De ascender y trascender, de ser feliz, de vivir. Porque aquello de que perseguir sueños es una utopía es sólo una mentira generalmente aceptada que, de tanto repetirse, se ha creído que es verdad.
Lo cierto es que cuando dejas un buen trabajo para vivir tu propia aventura profesional, el mundo te mira tildándote de loco e insensato cuando no de irresponsable… Pero tú sigues adelante y sonríes pensando para tus adentros que tú eso -lo del buen trabajo- ya lo has hecho y que ha llegado el momento de pedirle más a la vida.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.
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