¿Quién dijo gris?

Como su universo, está lleno de color. Tom’s Bar es el primer establecimiento del mundo consagrado al creador alemán Tom Hoffaman. Está en Madrid y además de tomarse una copa, el cliente puede encapricharse de más de 120 piezas de arte y, en el momento, adquirirlas.

Copas y cócteles, picoteo, sushi y buena música componen la oferta del nuevo local que abre sus puertas en el Paseo de La Habana de la mano del que fuera pareja del artista, Arno Müller.

De él se dice que era optimista, ingenioso y auténtico. E irreverente. Sus piezas, objetos únicos, vibrantes y un punto provocativos, están inspiradas en el Pop Art americano, con reminiscencias al surrealismo de Yellow Submarine y elementos propios de la ornamentación folclórica en las culturas europea, asiática y africana.

Muchas de ellas, concretamente 120, se encuentran en este nuevo local llamado a convertirse en la dirección de moda. Pintados a mano, se trata de objetos decorativos como sus famosos Cats & Dogs o el icónico leopardo Roy, los personajes estereotipados de la International Characters Collection, sus querubines y figuras zodiacales así como sus furgonetas y escarabajos Volkswagen. Junto a ellos, menaje, como las champaneras, y mobiliario: sofás, banquetas y butacas tipo Versalles, espejos y paragüeros, etc. El precio, desde 9,90 a 2.650 euros.

Habrá quien, por supuesto, busque compras originales. Para ellos y para quienes solo desean ver y ser vistos, la oferta incluye más de 130 ginebras y una larga lista de vodkas, rones, etc. Para acompañar, embutidos ibéricos y sushi, que siempre resultan apetecibles.