Animal print, cuadros, flores... Un estampado en tu armario.
Botánicos, animales, geométricos... Los estampados han vuelto a ser los protagonistas un año más de nuestro armario.
O no… Como manda la tradición, diciembre es mes de echar la vista atrás y hacer una pequeña recopilación de lo que nos ha acompañado durante los últimos 365 días o, lo que viene siendo lo mismo en el mundo de la moda, la última temporada. Esas pequeñas cosas que han ido cobrando protagonismo y que no sabremos si seguirán ‘vigentes’ durante los próximos meses pero que, cuanto menos, sí despedirán un año más en nuestros armarios.
Por supuesto si hay algo que no podemos olvidar es el estampado, aunque quizás haya pasado desapercibido en los últimos tiempos entre la marabunta de volantes, texturas y formas… Pero de eso ya hablaremos. ¿Qué podemos afirmar que hemos llevado este 2016 sin convertirnos en una vergüenza fashionista? Empecemos por el rey de los reyes: el animal print. El tejido que surgió en los años 20 y que ha sido desgastado hasta la saciedad por los grandes del rock continúa un año más como signo de sensualidad, lujo, sofisticación y, para qué negarlo, en algunos casos algo cursi. Y es que como dijo Dior, ‘si eres dulce y justa, no lo uses’. Aunque hemos visto alguna blusa o minifalda, el abrigo ha sido el encargado de dar soporte a los estilos más felinos de la temporada.
Las flores tampoco nos han dejado indiferentes, en bordados o en impresiones sobre tejidos soft, ideales precisamente para el tipo de mujer del que hablaba anteriormente el señor Christian. Además hemos podido aburrirnos de todos los tamaños: versiones xs sobre gasas y XL sobre pantalones, camisas o incluso chaquetas. Lo mismo ocurre con el color, desde la paleta clásica hasta bordados desapercibidos que se mezclan con fondos neutros.
A todo esto… ¿alguien ha dicho cuadros? Hombre por favor, ¡faltaría más! Pero en versión XL y a dos colores, por favor. Han sido los encargados del estilo grunge, nada de ‘mujercitas’ ni recoger flores en el campo. De corte masculino, oversize y acompañados de pantalones slim fit . La versión más femenina viene en forma de vestidos mini con vuelo o modelos camiseros hasta la rodilla. ¿Cómo evitar que parezca que llevamos un camisón de franela? Imaginación y estilo, benditas cualidades.
Lo que está claro es que el 2016 ha vuelto ha ser el año de las personalidades, de aquellos que se toman la vida menos en serio, que ven las cosas de otro color que no sea blanco o negro. De las personas que no han dudado ni un momento en meter un leopardo en su armario…