Dime con quién te juntas y te diré en quién te convertirás.

Muchas veces he hablado de como el ser humano aprende por imitación. Hoy la neurociencia nos ha explicado la relevancia que las neuronas espejo tienen en este comportamiento, y como adultos, ¿cómo podemos sacar provecho de este descubrimiento?

Terminas convirtiéndote en forma de actuar y pensar, como las personas de las que te rodeas. De hecho te invito a que pienses las implicaciones de que así no fuera, si te comportaras destacando hacia arriba (tomando arriba como algo positivo, más destreza, inteligencia, etc.), con toda probabilidad, serías rechazado por ser demasiado bueno para el grupo. Si destacaras por abajo (más tonto, menos hábil, etc.) serías ridiculizado y podrías llegar a irte tú del grupo por no sentirte aceptado como un igual. ¿Ves por donde voy? La mejor forma de permanecer en el grupo es no destacar mucho ni hacia un lado ni otro, si estás por abajo te esforzarás para que no se note, y si destacas por arriba, igualmente disimularás para que nadie se sienta inferior. ¿Resultado? Lejos de desarrollar tu talento lo estarás mermando.

Puestos a tener que elegir, escoge un grupo de personas que sean mejores que tú, siempre el esfuerzo por ser mejor en algún área, te traerá recompensas. Las palabras crean acciones, por lo que también es importante elegir qué decides escuchar y creer, ya que esas palabras terminarán transformando lo que crees, y en consecuencia cuál será tu futuro.
La elección de los «compañeros» de vida es más importante de lo que jamás se ha pensado, piensa en cómo es el futuro que quieres vivir y elige bien quienes son los mejores compañeros de viaje. Piensa en quién quieres convertirte, y rodeate de personas que puedan inspirarte y servirte de modelo para lo que deseas lograr.