Mercadillos de otoño.

Hacer un viaje de compras a Londres no tiene por qué ceñirse a Navidad o a los periodos de rebajas. La capital británica cuenta con numerosos mercados populares en los que es posible encontrar gangas durante todo el año y es en otoño, cuando la ciudad vive a pleno rendimiento, cuando los tenderos renuevan su mercancía.

Los hay clásicos, como los mercadillos de Camdem Town (terrazas, moda surrealista, reciclaje…) y Portobello (anticuarios, casas de colores, restaurantes de vanguardia…), pero también algunos a los que el turismo de masas no ha llegado aún y en los que es posible sentirse como un londinense más. Uno de estos es el de Clapham, al suroeste. Este barrio, entre cuyos vecinos abundan los arquitectos y los diseñadores gráficos, es una mezcla de culturas en las que conviven todo tipo de restaurantes, tiendas, puestos de frutas… Dedicar una mañana a pasear por sus calles es, sin duda, un acierto.

Covent Garden (en la zona bohemia, con su mítico Apple Market y algunas de las casas más ‘chic’ de moda) y el Leadenhall Market (famoso por ser el mercado donde se grabaron las escenas de compras de ‘Harry Potter’ y especializado en alimentos frescos) rivalizan con las galerías de Oxford Circus, Regent Street y los alrededores de Picadilly. En estas últimas se encuentran las firmas más exclusivas y no es raro encontrar ediciones limitadas realizadas ‘ex profeso’ para estas boutiques.

Toca desempolvar las libras que tenemos guardadas en casa y realizar una escapada a una de las ciudades más mágicas del planeta.

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