El Turcal, vanguardia en la pequeña Suiza española.
Un coqueto hotel Rusticae en el Valle de la Vera.
Adentrarse en el valle de La Vera y disfrutar de los paisajes que la naturaleza de este rincón Cáceres nos ofrece no es baladí. Este valle conocido también como ‘La Pequeña Suiza’ por la exuberancia de sus paisajes siempre es una opción perfecta para escaparse gracias a la combinación de veranos e inviernos suaves. Las más cincuenta gargantas naturales de aguas cristalinas y sus bosques verde intenso se convierten en una experiencia memorable, sobre todo, si lo hacemos en primavera u otoño donde despliegan su mayor belleza.
En este entono rico en lo cultural y en lo paisajístico aparece El Turcal, un hotel que habita un antiguo secadero de pimiento y tinadas de comienzos de 1900 y que nos sorprende por una rehabilitación donde la intención de los propietarios fue conseguir una imagen limpia de este hotel Rusticae de la provincia de Cáceres.
Este hotel con encanto ha sabido adaptarse a los tiempos gracias al aspecto vanguardista de sus interiores y mobiliario donde la transparencia y la limpieza de superficies se apropian del espacio. Un auténtico lujo en espacio, en las pequeñas cosas, nada presuntuosas, en los detalles y en las sorpresas. Solados de barro cocido que dialogan con muros de piedra, forjados de madera, paredes, chimeneas, suelos de cristal y tejidos de diseño actual; todo para recrear un espacio acogedor donde el olor a mimosas o madroños, piñas, calabazas y velas añaden la calidez necesaria.
En el exterior el disfrute de los sentidos y la naturaleza. Nuestro rincón de intimidad y tranquilidad se encuentra en el patio interior, donde una zona ajardinada y piscina de aire zen nos dan el confort que necesitamos. Pero sin duda la plenitud de El Turcal llega al atardecer, cuando sus amplios espacios y las transparencias quedan bañados por los tonos dorados del que al atardecer entra e inunda todo el espacio.