Sycamore. The Mariner´s Children. Vídeo, letra e información.

Tras la publicación de su debut, el Ep aclamado por la crítica británica “New More Island”, el septeto The Mariner´s Children regresa con un nuevo disco, todavía más sobrecogedor y más emocionante que su primer trabajo. Se trata de otro Ep, esta vez titulado “Sycamore”, en el que abordan el tema del amor y de la muerte y exploran las diversas relaciones entre estas dos experiencias, tan intensas y humanas, y cómo ambas pueden distorsionar la lógica y la estabilidad de las personas.

Según Benedict Rubinstein, el compositor principal de la banda, “Sycamore” llegó en un momento en el que, por diferentes motivos, había tenido que asistir a una gran cantidad de funerales en un espacio muy corto de tiempo. Eso le dio pie para pensar mucho sobre la muerte pero, como en ese instante también estaba viviendo un gran amor, fue capaz de escribir sobre algo tan triste y lúgubre con un espíritu muy positivo. La canción, que no es alegre y que trata sobre el fin de las cosas, de la naturaleza, del paso del tiempo y de la impotencia ante su devenir y el esfuerzo por aceptarlo, no es sin embargo un canto desesperado, sino más bien de himno al amor.

El disco está producido por Ian Grimble, cuyo nombre se puede encontrar en trabajos de The Manic Street Preachers o Beth Orton, y ha sido grabado en dos estudios diferentes, Rockfield, que es un establo reconvertido en estudio de grabación, y 2khz, que antes era una iglesia. El sonido de The Mariner´s Children está a mitad de camino entre el folk más tradicional y con tintes celtas de Pentangle y el toque alternativo y actual de Arcade Fire. Son un raro hallazgo musical en el que la aparente fragilidad de sus composiciones resuena con una fuerza extraordinaria. Oscuros y eufóricos, distintos e inesperados.

El videoclip de “Sycamore” está dirigido por el galardonado director Joe Connor, quien también ha trabajado con Paul Weller, The Moon, The Courteeners, Blitz Kids, Band Of Skulls, Feeder o Pat Byrne, entre otros. Filmado en las tierras salvajes de la Isla de Arran, situada al noroeste de Escocia, cuenta con una increíble fotografía y con el magnético protagonismo del modelo Marc Brady. Simplemente mágico.

Bury me in the woods where the flowers bloom
And the roots of the trees and leaves will be my tomb
Let my flesh feed the sycamore tree
In whose arms you can climb if you ever feel you’re missing me

Over my body and bones roses they rise
And the name on my stone is claimed by the growing vines
Let my flesh feed the weeping willow tree
In whose shade you can lie if you ever feel you’re missing me

Only one thing’s certain
One day there’ll fall a curtain
Our bodies they will worsen
But love will soothe the hurting
And you can’t run or bargain
Beg or plead for pardon
Though remote it’s always ardent
Which causes hearts to harden

I’ve no wish to die
I’ve no wish to leave your side
But if I go before you then heed these words of mine
Let my flesh feed the sycamore tree
In whose arms you can lie if you ever feel you’re missing me

Only one thing’s certain
One day there’ll fall a curtain
Our bodies they will worsen
But love will soothe the hurting
And you can’t run or bargain
Beg or plead for pardon
Though remote it’s always ardent
Which causes hearts to harden

When night shuts my eyes
I’m gone, I’m gone
A fire without a light
I’m gone, I’m gone.