Tú a una Villa, yo a una Casa Ducal.

En la costa suroeste de Tenerife y junto a la hermosa Playa del Duque bañada por el Atlántico, se esconde un delicioso oasis tropical rodeado de arena dorada y aguas cristalinas. Entre esos jardines interminables y exuberantes se alza el Gran Hotel Bahía del Duque majestuoso, soberbio, con influencias decorativas victorianas y venecianas.

Inaugurada en 1993, esta singular edificación se inspira en la arquitectura tradicional canaria de finales del siglo XIX y principios del XX para recrear una pequeña villa de diecinueve casas independientes con patios y rincones pintorescos y piscinas infinitas. Por si fuera poco, dentro de este resort de lujo nos encontramos con un grandioso Spa volcánico, las exclusivas Casas Ducales y las nuevas y lujosísimas Villas.

Las Casas Ducales, decoradas por Pascua Ortega y Perico Mesa, nos recuerdan a las antiguas haciendas coloniales: un regreso al pasado y una exquisita combinación de materiales nobles crean un ambiente de lujo y equilibrio inigualables; cuentan además con recepción privada y mayordomo.

Aunque para sentirse como una auténtica estrella de cine, en 2008 se inauguraron las Villas. Contemporáneas y elegantes, se han construido con piedra volcánica respetando así el entorno ecológico de Costa Adeje. También han sido diseñadas por el prestigioso interiorista Pascua Ortega que juega como nadie con los espacios, la luz  y el color. Amplios salones, terrazas, jardines paradisíacos, piscina privada estilo infinity, hora del té, baños de aromaterapia a la carta, mayordomo y botones exclusivos, equipos de música Bang & Olufsen… ¿Se puede pedir algo más?