Dormir bajo las estrellas del Valle de Guadalest.

Las montañas que resguardan el municipio alicantino de Benimantell pueden presumir de su total falta de contaminación lumínica. Esto las convierte en uno de esos rincones de la Península en los que poder avistar la bóveda celeste como lo hacían los pobladores del planeta antes de que se inventara la electricidad.

Es por ello que no nos extraña que sea allí donde haya nacido un concepto de lujo hotelero en el que el énfasis no se pone en el establecimiento, el diseño, la arquitectura o el servicio, sino en el marco donde se puede desarrollar la escapada. Una cita con el cosmos que parte de la filosofía ‘slow’ para crear una sensación de evasión casi holística.

Allí, en el valle de Guadalest, ha abierto sus puertas el primer ‘hotel paisaje’ de nuestro país. Llega de la mano de Vivood Landscape Hotels y es solo para adultos, con una amplia carta de actividades deportivas y lúdicas al aire libre.

Claro que ninguna como la relacionada con la astronomía. Un equipo de la Universidad de Alicante, junto a su telescopio, guían las miradas fascinadas del huésped interesado en la observación de estrellas. Ver el anillo de Saturno, el Mar de la Tranquilidad o aprender a orientarse de noche en cualquier continente son algunas de sus lecciones en el Vivood.

Compuesto por 25 suites, cada una con 27 metros cuadrados y amplios ventanales con vistas a las montañas, el complejo se ubica en una parcela de 84.000 metros cuadrados, en pleno paraje natural. Con cena al aire libre, sesión de Astronomía y desayuno, dormir allí es posible a partir de 370 €/hab.

Claro que la fascinación de ver con nuestros propios ojos lo que parecía vedado a profesionales del cosmos no tiene precio. De Alicante volveremos a casa con un poco de astronautas y un mucho de amantes de la naturaleza y el espacio.