Ascona, el arcoiris de Suiza.

Fachadas de colores, un lago precioso y un paisaje montañoso que se cubre de blanco durante los meses de invierno. ¿Quieres saber más de este pintoresco pueblo suizo?

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En la orilla norte del Lago Maggiore es donde encontramos Ascona, el pueblo más bajo de toda Suiza. Pero pese a estar a 196 metros sobre el nivel del mar, eso no evita que esté rodeado de montañas altas que durante los meses de frío quedan cubiertas por un manto de nieve. Un color blanco que no hace más que combinar a la perfección con el resto de colores de este pintoresco lugar.

Y es que Ascona es un pueblo lleno de vida y de colores. Así lo permiten las montañas que lo bordean, el lago junto al que se construye el municipio y las fachadas de colores de los edificios que se levantan a orillas del lago, convertido a su vez en un pequeño puerto. El paisaje en Ascona es sencillamente maravilloso; es como un pequeño arcoíris suizo que conquista el corazón de quienes tienen la suerte de presenciarlo.

Así, un simple paseo por sus calles se convierte ya de primeras en un plan sensacional. Porque por las calles de Ascona se respira naturaleza, pero también un ambiente mediterráneo gracias a su clima y las cafeterías con terrazas que permiten sentarse a disfrutar de la vida y del lugar. Unos cafés que se encuentran en una zona libre de vehículos para que sea solamente peatonal y se pueda disfrutar de ella con mucha más tranquilidad.

Pero además del paisaje en sí, en Ascona destacan algunos lugares en concreto dentro de su casco antiguo. El primero del que vamos a hablar es la iglesia San Pietro e Paolo, una basílica que data del siglo XVI, cuenta con un campanario muy alto y se ha convertido en el símbolo turístico de esta localidad.

Además, también se puede subir al monte Verità, pues allí se encuentran algunos edificios de las universidades de Lucerna y Zúrich. Pero eso no es todo, sino que también hay un museo que cuenta la historia de la colonia que fundaron allí algunos contestatarios a principios del siglo XX.

De esta manera, Ascona se convierte en todo un reclamo turístico porque tiene de todo. Paisajes que dejan sin habla, atmósfera mediterránea en la que se juntan la costa y la montaña, vida e historia. ¿No os apetece ir a conocer esta preciosa localidad?

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