Seguro que has visto la imagen más de una vez: un grupo de delfines salta alrededor de un barco, jugando con las olas que la embarcación provoca, divirtiéndose como niños. O, también, en un acuario, entrenados para divertirse y divertir, nadando junto a los pequeños y los no tanto, en una experiencia única. Y seguro que alguna vez has pensado que sería estupendo poder ser el que está ahí, en la piscina o en alta mar, compartiendo chapuzón con nuestros ‘colegas’ mamíferos. Pues deja de soñar y escápate a alguno de estos cinco lugares.
Los delfinarios que hay por todo el planeta no son exclusivos para los que saben nadar, aunque está claro que es dentro del agua cuando más se disfruta. Eso sí, si te da miedo, no sabes o prefieres estar con los pies en tierra, lo normal es que puedas participar del momento con los delfines acariciándoles el lomo. También es posible disfrutar en familia, pues en algunos centros se puede acceder en grupo.
¿Sabías que tienen todo un repertorio de movimientos clasificados? Así, podemos nadar con ellos mientras hacen remolinos (cuando nadan a tu alrededor), dan besos con el hocico, saltan, bailan al ritmo de la música o incluso nos dan un abrazo, que es como se llama el movimiento con la mitad del cuerpo fuera del agua y utilizando las aletas para hacer como que nos abrazan.
Los delfinarios son cada vez más sofisticados. Los mejores se encuentran en América del Norte, sobre todo en Estados Unidos y México, pero no son los únicos lugares, ya que están repartidos, como los propios delfines, por todo el planeta. Europa (sobre todo Portugal, en España no está permitido hacerlo por ley en alta mar), Oriente Medio, Asia… no hay rincón donde no sea posible nadar con ellos, pero mucho mejor hacerlo en estos lugares que hemos elegido. En ellos, la aventura y la diversión está más que asegurada.
En este popular parque de atracciones acuáticas de la Riviera Maya, en México, es posible disfrutar del llamado Dolphin Trek, que no es otra cosa que una caminata submarina que se realiza con un equipo de respiración especial junto a los delfines. Deberás colocarte un casco de buceo que te proporcionará el aire necesario para caminar debajo del agua a través de un sistema digital monitoreado.
Los niños pueden darle besos y acariciar a los delfines en este parque del sur de Portugal. A pocos kilómetros de la localidad de Albufeira, Zoomarine incluye el programa Dolphins Emotions Premium, donde se realizan diferentes inmersiones y chapuzones con los delfines, así como talleres que nos informan sobre su cuidado y conservación.
Dolphin Reef Eilat, en la costa israelí del mar Rojo, permite a los visitantes disfrutar de un rincón bello como es el golfo de Aqaba, con Egipto y Jordania a los lados. Allí es posible participar de actividades con los delfines que incluyen el buceo y el esnorquel. Perfecto para verlos en su hábitat natural.
Uno de los delfinarios más famosos del mundo es este en Florida, donde es posible ser ‘entrenador de delfines por un día’. Así se llama un programa que está pensado sobre todo para niños, pero que también está abierto a mayores, en el que, tras un pequeño taller, se puede uno dar un baño de media hora con los delfines, interactuando con ellos e incluso participando de una sesión de fotos.
En Roatán, la famosa isla paradisíaca de Honduras, se encuentra Anthony’s Key, un resort famoso por su delfinario. Creado en una isla, su Instituto de Ciencias Marinas permite la inmersión con delfines residentes, estar hasta media hora jugando con ellas (supervisado por monitores) y participar de esnórquel y buceo entre delfines, así como aprender de estos animales en talleres.
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