Estos son los ricos platos de invierno del restaurante georginao Nanuka.

Nanuka es un restaurante georgiano en Madrid que nos desvela los sabores georgianos de invierno.

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Nanuka es un pequeño bistrot en el que disfrutarás tan ricamente de la gastronomía georgiana, más ahora que acaba de estrenar platos de invierno y sus miércoles de Khinkalis, dicho de otro modo, sus miércoles a la georgiana con menú cerrado y para compartir.

En cuanto a sus nuevos platos de invierno, te encantarán las croquetas georgianas que se parecen a las nuestras pero que ofrecen un toque sápido diferente gracias al uso generoso que los georgianos hacen de las especias; ¿eres de sopa? prueba la Chikhirtma, una sopa de pollo y verduras aliñada con hierbas aromáticas; ¿eres de pescado o de carne? Si eres más de mar te encantará el pescado con adjapsandali, que es lomo de bacalao con pimientos guisados, salsa blanca con toques ahumados y especias georgianas y, si eres más de carne, disfrutarás de lo lindo del Chakhauli, carrillera de gernera con suave salsa de nueces y glasé de cebolla roja.

La segunda novedad del Nanuka, junto a sus platos de invierno, son sus miércoles de Khinkalis que consisten en un menú cerrado para dos que sirven tanto en horario de comida como de cena todos los miércoles; ¿y en qué consiste este menú? Comienza con Pakhauleuli, que es un surtido de dips georgianos de berenjena, remolacha, calabaza y espinaca servicos con pan de maíz; a continuación se sirven los Khinkalis, que son uno de los bocados más famosos y tradicionales de la gastronomía de Georgia, se trata de una masa cocida y rellena ¿los rellenos? Carne picada y caldo, hongos y hierbas, queso ricotta… El menú marida con vinos georgianos y deja el postre a la libre elección de los comensales, además incluye un chupito de chacha que es algo así como el orujo de Georgia.

Está en Madrid, en el barrio de Chueca, encuéntralo en el número 13 de la calle Libertad y descubre a qué sabe Georgia en invierno.

Saborear

Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.

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