Y de repente… 40.

Así, sin darte apenas cuenta, 40… o alguno más, incluso. Y es que el tiempo volaba mientras tú lo ocupabas con quehaceres, planes, quieros… de los estudios al trabajo, los niños, la casa, las vacaciones, los sueños, la vida…

Y en un rato de descanso, de paz, de vacaciones, en casa de mamá… alguien saca las fotos del baúl de los recuerdos, las de ese tiempo tan lleno y tan vivido… o peor, te encuentras con antiguas compañeras de estudios y te convences de que han hecho algún pacto con el diablo sin invitarte a ti al akelarre.

Pero no, no hay pactos con el diablo, ni el tiempo es tan malo y traicionero, tampoco es que los radicales libres se hayan cebado contigo… es que la piel del rostro necesita cuidados y agradece los mimos; afortunadamente Decléor piensa en las pieles maduras… y en su juventud, y les dedica toda una línea de productos: excellénce de l’age.

La piel se regenera durante la noche y se prepara para el día y su luz, aire, frío, calor, sol… proteger la piel no es suficiente, su brillo y su luz empiezan en su limpieza, más si cabe en las pieles maduras.

Aroma cleanse lait et lotion démaquillant jeunesse son dos productos: leche y loción, y ambos tienen un doble objetivo: por la noche, limpiar la piel liberándola del exceso de sebo, células muertas y de las impurezas que obstruyen sus poros para que pueda oxigenarse más y mejor prolongando su juventud y, además, por el día, preparar la piel para su mejor respuesta a las cremas y tratamientos que le dediquemos.

Aceite esencial de magnolia y almendra dulce, de té verde, limón, naranja, rosa damascena y romero, de geranio, camelia… y ácido hialurónico; se trata de una equilibrada y mágica composición en aceites esenciales que, además de limpiar la piel, la nutren y tonifican ayudando a reducir las líneas de expresión.

Cuida la piel de tu rostro, mantén su juventud con Decléor excellence de l’age… y sonríe, porque nada rejuvenece más que una sonrisa.

Decléor