¿Acaso es pedir demasiado?

La búsqueda del fondo de maquillaje perfecto debe ser lo más parecido a lo que fue la búsqueda del Santo Grial por parte de los caballeros del rey Arturo ¿no te parece? Salvando las distancias, claro. Ellos eran todos hombres (Ginebra no buscaba) y nosotras somos todas mujeres. Pero el tiempo empleado, los lugares visitados, las historias leídas, los relatos escuchados y la devoción que ponemos en seguir cada pista debió ser similar en ellos.

Pero nada. Que no damos con uno perfecto. Uno que sea a la vez fundente y ligero, cubriente y sutil, que tape lo feo que ensalce lo bonito, que respete la piel y la deje respirar, que se lleve bien con el tratamiento de debajo y con los polvos y el colorete de encima, que sea fresco, natural, duradero, hidratante… ¿Acaso es pedir demasiado?

Chanel lleva desde 2002 ofreciéndonos sus propuestas. Se trata de la familia Vitalumière. El primero fue Fluide, luminoso y confortable, un best seller favorito de los profesionales. Luego vino Eclat, igual al anterior pero en formato compacto. Después, Aqua, casi transparente. Y ahora llega Aqua Compact: textura fina y fundente, de fácil aplicación, muy hidratante, ideal para arrancar el día y para retoques sucesivos. Está disponible en 13 tonos, incluye fotoprotección y cuesta 51 euros. ¿Será éste nuestro Santo Grial?

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