El Kunstmuseum Basel abre sus puertas a la fotografía.

Es la primera vez que el Kunstmuseum Basel acoge una muestra de fotografía. Es también la primera exposición que se presenta en Suiza parte de los fondos pertenecientes a Ruth y Peter Herzog. Andaba la pareja de mecenas trasteando entre las antigüedades del Mercado de la Pulgas de París cuando una imagen llamó su atención. Fue aquella la primera de una extensa colección fotográfica compuesta por más de 500.000 instantáneas tomadas entre los últimos años del siglo XIX y la década de 1970, tanto por artistas profesionales, amateurs e incluso anónimos de diversas nacionalidades.

La colección de los Herzog cuenta con una prolija variedad de temas, escenarios, motivos y enfoques artísticos que no se limita al amontonamiento de imágenes, sino que narra gran parte de la historia de la fotografía. Tanto es así que su acervo se considera hoy en día como una auténtica enciclopedia visual que refleja la vida, los cambios y la evolución de la sociedad industrial. La diversidad de la colección ofrece además diferentes enfoques para explorar el mundo con y a través de la imagen.

Para esta exposición, comisariada por Olga Osadtschy y Paul Mellenthin, el Kunstmuseum Basel ha seleccionado 400 piezas entre las que destaca un importante número de trabajos de autores anónimos, imágenes comerciales y científicas del siglo XIX y una recopilación de fotografía publicitaria y documental del siglo XX. Muchas de las obras nunca se habían expuesto al público. No radica en este detalle la originalidad de una muestra que va más allá de lo habitual exhibiendo, además de impresiones en papel, objetos como daguerrotipos, ambrotipos y ferrotipos, y copias en autocromo, albúmina y gelatina de plata.

El increíble mundo de la fotografía marca además el inicio de una cooperación a largo plazo entre el Meuron Kabinett, propietario de la colección de los Herzog desde 2015, y el Kunstmuseum de Basilea. De hecho la innovadora arquitectura diseñada para el espacio expositivo del museo se desarrolla a partir de los espacios del Kabinett y teniendo muy en cuenta las condiciones lumínicas requeridas para que las piezas luzcan todo su esplendor.

La colección Herzog se distribuye en nueve salas temáticas en diálogo permanente con importantes obras pictóricas de la colección del Kunstmuseum y otras prestadas por la Fundación Emanuel Hoffmann. Esta conversación artística permite indagar en las interconexiones de ambas disciplinas: influencias, motivos y criterios compositivos, y en las fronteras (cada vez más fluidas) entre una y otra.

En el marco de la exposición, el museo suizo ha creado por primera vez una herramienta de mediación en línea llamada digitorial. La iniciativa forma parte del proyecto digitorials.ch y cuenta con el apoyo de Engagement Migros con el fin de desarrollar estrategias específicas para afrontar los retos de la era digital.