Rafa Sañudo, el chico RaRo de los colores fuertes.

Miles de universos que brotan de su lápiz… El color, la fluidez de sus líneas y esa tipografía tan característica, como sello de identidad de Rafa Sañudo. La ilustración como punto común de toda su obra que va desde el diseño hasta la realización de videos. Porque Rafa siempre dibujó, pero por esas cuestiones del corazón se metió a hacer teatro. Y le fue bastante bien, hasta que las manos pidieron más garabatos que palabras y se sumergió de lleno en la escenografía.

La música también ha sido parte de su vida y allí lo encontramos en varias portadas de Alejandro Sanz, Los Secretos y Hombres G. Aunque el cine también ha tenido algo de su pluma a través de los ‘storyboards’ que dibujó para los hermanos Coen en Fargo. Pero no sólo has cantado canciones y te has emocionado en el cine a través de su arte… él también te ha hecho viajar en metro, porque el actual plano del Metro de Madrid es obra suya y del equipo de su estudio “RaRo”. Y lo has visto en Vogue y en Rolling Stone, en libros, agendas y miles de comunicaciones realizadas para Fundación Canal y Teatro Canal.

Del niño que garabateaba sin cesar a este adulto, ha quedado todo, incluso las preguntas que lo ponen incómodo. Al menos tres cafés y un pincho de tortilla sirvieron para clarificar su mente antes de respondernos, porque para ser Rafa Sañudo hay que ser un poco inconformista cambiar lo existente agregándole colores, imaginando mundos que cobran vida a partir de un papel. Papel, porque entiende la tecnología como una herramienta, pero no un fin. Hay que usarla para estar en el mercado… pero donde haya un pincel y un papel…

Hoy se gana la vida haciendo esas cosas por las que le echaban de clase aquí.

De pequeño jugaba a hacer garabatos en los márgenes de los «espantosos» libros de texto. «Creo que mi deseo de diseñar fue cambiar todas esas asquerosas portadas, aquellos engendros estéticos, diseñados muy probablemente por arquitectos tecnócratas, amigos de alguien, en algún oscuro Ministerio, diseñadores de ciudades dormitorio en la nómina de constructores mangurrinos de la España tardofranquista del gresite y la uralita de mi infancia. Por dibujar me echaban de clase. La mochila todavía la llevo, pero es más bonita que la del cole, y mis hijos y sobrinos también cargan con las suyas personalizadas.» En USA recibió una educación en positivo, detectaron rápido su mano y talento y enfocaron su energía a desarrollar esa desbordante creatividad. Hoy se gana la vida haciendo esas cosas por las que le echaban de clase aquí.

Dónde están los Estados Unidos de América, antes de mudarse allí, lo debió aprender junto a su abuelo con el que consultaba el Atlas Vidal-Lablache de 1887 mientras leían juntos «La vuelta al Mundo en ochenta días». «A mi abuelo se le paró el reloj en el ´39, era anarquista, enamorado de una falangista… y al salir de la cárcel ya sólo supo relacionarse con niños. Los adultos le daban mucho asquete«.

3 marcas, 21 packagings de zumo para un cliente de China, un videoclip para Disney…

20 buenos años de profesión, en los que ha tocado todos los palos, no le quitan el miedo y piensa que se va a caer de la bicicleta: “cuando tienes gente a tu cargo, empleados, pasas angustia. La angustia me viene siempre de lo mismo: del pasado (los reproches) y del futuro (el miedo). Si me quedo quietecito en el momento y me como la paella, estoy muy requetebién. Ultimamente medito. poco, 20 minutitos cada mañana, pero me ayuda un montón.”, y mientras inventa soluciones plásticas que ayuden a sus clientes a comunicar y resuelve los 60 proyectos que tiene en marcha, 3 marcas, 21 packagings de zumo para un cliente de China, un videoclip para Disney y 5 presentaciones, Rafa juega. Juega a contar historias de mil maneras diferentes, en su casa, en su estudio y esas libretas que le acompañan que se llenan de “garabatos y monigotes”, y de ahí proyectos como el nuevo vídeo de Grant Thornton “La Recuperación Desde un Punto de Vista Diferente”, la continuación de aquel “La Crisis Desde un Punto Diferente” que se hizo viral en Youtube. Pero lo que de verdad le hace feliz es hacer felices a todos, a sus clientes, a su equipo… Para Rafa ese es el triunfo y disfruta viendo a su gente pasarlo bien y a sus clientes contentos.

Siente debilidad por el gazpacho con comino de su suegra…

… y por el Eau de Cashmere de Francis Kurkdjian -le enloquecen los perfumes, los colecciona-, por su Omega Seamaster del 63, sus Pilot Jetstream negros, sus gafas del los 40 -“con ellas veo fenomenal!”— y por la Montblanc diseñada por Marc Newson a la que sucumbió hace poco, pero parece que le tiene un cariño realmente especial a un abrigo de cashmere que le hizo un sastre de la Gran Vía que se jubilaba: “fui su último cliente, y aquello era delicioso, cada visita, ver todo aquel aparataje y espacio que se iba a desvanecer nada más acabase mi abrigo. Una pena y un placer. Y cada vez que me lo pongo, lo disfruto doblemente”; Y están sus agendas, un regalo de Navidad de Raro que se convirtió en un regalo para si mismo.

‘La rutina empobrece, Sañudo’, le dijo Mingote.

Lo último que ha leído: Manuel Chaves Nogales, “El Maestro Juan Martinez que esta ahí“, y recuerda con intensidad Los Miserables de Víctor Hugo “qué rabia me dio cuando vi que me acercaba al final”. Y el cine más allá de sus creaciones, de su participación: junto a la filmografía completa de John Houston, y en especial “El hombre que pudo reinar“, un “Con faldas y a lo loco” y “One, Two, Three” de Wilder. Y si alucina con la música de Donavon Frankenreiter -“es salvajemente bueno“- es que, aunque no lo sepa y aunque su lugar en el mudo lo encuentre en el salón de su casa, debe tener además alma de surfero. Y quizás por eso también lucha contra la rutina. Por eso y por una recomendación: “Mingote me dijo una vez que él cruzaba todos los días el Retiro por un lugar diferente. Cuando le pregunté por qué, me respondió: ‘porque la rutina empobrece, Sañudo’. Y eso intento hacer. Cada día cosas diferentes. Mi mujer está harta, dice que por qué tenemos que hacer posturas tan raras cada vez, que tiene contracturas… jajaja.”

Para Rafa la belleza es esquiva «Para mi suele ser un recuerdo. Las cosas son más bellas una vez pasadas. El filtro de la memoria las favorece, las multiplica«. Entre lo bello y lo útil, los relojes, su fetiche «Me ponéis los dientes largos cuando leo los reportajes, aunque soy anti-lujo (qué contradicción!). Me gusta vuestro desorden, que tocáis muchos palos, muy diferentes. Sois un cajón de sastre, y eso me va.» Se refiere a Loff.it, claro.

Entre pinceles y papeles en blanco, el chico que dibujaba sin parar para cambiar su mundo gris logró sobrevivir en este hombre que resuelve problemas con garabatos y monigotes, creando soluciones artísticas para sus clientes y para cada uno de nosotros que le estamos agradecidos, algo nada y muy RaRo.