Lala Serrano: la belleza de la imagen, la imagen de la belleza.

Fotógrafa, genial y genial fotógrafa, inquieta, incansable y sacándole a la vida lo más bello.

  • facebook
  • Tweet
  • pinit
  • WhatsApp

Madrileña con ascendencias manchegas, Lala nace en una familia numerosa en los 80. Primero quiso ser médico y luego profesora, pero descubrió casualmente en una clase literatura “el texto publicitario”. Ese fue su primer contacto con la publicidad, donde pasaría años. Licenciada en Publicidad y RR.PP en Madrid, vivió y estudió en Roma, aprendió lo bello de “il dolce far niente” en la Costa Amalfitano antes de especializarse en Gestión publicitaria en la Complutense.

Tras años trabajando en agencias de publicidad, no tuvo más remedio en aceptar el destino: tenía que irse a vivir Los Ángeles. Allí estudió Estilismo y Merchandising cuando movida por unaúnnosabequé retoma la fotografía, algo que siempre había cuidado como hobby y comienza a dedicarle más tiempo a lo que hoy le hace feliz a ella y a todos los que admiramos su trabajo. Porque le encanta fotografiar cosas bonitas y de su trabajo sale lo más bello. Habla tres idiomas y no lo hace tan mal, es más, los borda. Intenta disfrutar de todo lo que hace y tiene tres sobrinos (aunque eso no es mérito suyo).

Este perfil trazado es el de un ONE al que le tenemos especial cariño. Más si cabe por la distancia, porque una vez que se hizo las américas y volvió para que la conociéramos, para cautivarnos, explora el otro lado del mundo con sede en Sidney. Y desde allí aún nos tiene mucho que contar. (Y no puedes dejar de ver sus trabajos, la galería de imágenes… imperdible mientras descubres a quién hay detrás de la cámara).

 

¿Tú qué pintas?

Somos 4 hermanos, pero son más mayores que yo y todo chicos, así que no me quedaba más remedio que inventarme mis historias… Recuerdo que pintaba mucho. Pintaba por todos lados. Teníamos una terraza donde solía  pintar “cuadros” en el suelo con tiza. Si alguien quería salir a la terraza, tenían que pagarme 100 pesetas porque podían ver mi “obra de arte” y ¡eso había que pagarlo! Entonces ya tenía visión de negocio, (jajajaja…)

«Pinto con luz y me encanta»

Me apasionaba pintar, fui algún concurso representando a mi colegio incluso. Y también escribía de vez en cuando. (Pintar y escribir. Ya apuntaba hacia publicidad… ) Desgraciadamente no hago ni una cosa en lienzo ni la otra sobre papel, pero pinto con luz y me encanta. 

Y a nosotros, pero nos preguntamos por lo qué atesoras en esos preciosos bolsos con tanto estilo que siempre llevas

Pues mira, traigo una licenciatura en Publicidad, trabajos adolescentes de supervivencia para pagarme el carnet de conducir y otros vicios, posteriormente un master en gestión publicitaria, 6 años trabajando en publicidad y marketing, viajes por el mundo, estudiar en Roma, trabajar veranos en Londres, un master en fotografía de moda y publicidad y traigo hasta una crisis existencial que me llevó a Los Ángeles.

«Lo mejor es que la mochila no está llena»

Con todo ello, traigo muchas experiencias, como es normal. He trabajado en bastantes sitios de diferentes cosas e inevitablemente tengo muchas anécdotas. Me encanta observar y absorber. Observando se aprende muchas cosas. 

Pero lo mejor es que la mochila no está llena, es más, está casi vacía y todavía queda mucho hueco por llenar. 

 Sigues «jugando» como cuando eras niña…

Pues afortunadamente sí. Trabajo en fotografía y publicidad…y además sigo con crisis (Jajaja) ¡qué más puedo pedir!   La verdad es que disfruto muchísimo todo lo que hago. 

También nosotros seguimos en crisis, diez años ya, pero igual no hablamos de lo mismo. Nosotros nos acordamos con cariño de cosas de cuando empezó todo, de cuando éramos pequeños. ¿qué recuerdas tú de aquellos tiempos?

Cuando mi madre me recogía los viernes. Era un día especial. Me recogía en el colegio y nos íbamos paseando hasta una pizzería (no tan común en aquella época) y nos tomábamos una porción. Era el premio de la semana ¡qué alegría!

También recuerdo una cinta de cassette de la DGT con Gomaespuma. Es escuchar esa cinta y viajo al verano. Me encanta todo lo que me sugiere, todo lo que me trae, todavía la escucho de vez en cuando.  

Y hoy ¿a qué juegas?

Juego a ir de boda, a las profesoras, a las vendedoras y al escondite. Juego mucho. Tengo tres sobrinos preciosos que me dan la vida.  

Juego a ser fotógrafa, éste me encanta. Juego a gestionar clientes en publicidad. Y también juego al mus.

Pero no te has dado mus con tu aventura Australiana. Ahí sigues, con un pie allí y un montón de fans apasionados aquí. A tí, en realidad ¿qué te apasiona?

Sigo muy vinculada con “las artes”, hojeo muchas revistas, siempre que puedo viajo, trato de ir a muchas exposiciones, conciertos, ver películas y ver muchos anuncios. 

He evolucionado en cuanto a técnica y referencias, lo que ha hecho que la pasión esté más viva. Y estoy con el fuelle para que no se apague. 

Me apasiona también el no saber qué ocurrirá después. Estoy inmersa en una carrera de fondo que no sé cuándo acabará. Eso me engancha. Tengo ganas de hacer otras muchas cosas más. No me cierro a nada. Volver a pintar. Quién sabe. 

¿Hay un momento de tu vida que te haya conducido inevitablemente a este tú que adoramos?

Todo conduce inevitablemente a otro punto: yo tenía que trabajar en publicidad. 

Como también tenía que dejarlo todo: trabajo, casa, familia, pareja… Lo dejé todo y me fui a L.A.. Allí me apunté a un curso de estilismo, hasta que pensé en hacerme un curso de Fashion Photography, ¿por qué no unir dos de mis pasiones? Y así fue: me acerqué un día a una escuela de fotografía en Wilcox Avenue y me apunté al curso de “Fashion Photography”. 

Dejé el curso de estilismo como la vida que llevaba en Madrid. Atrás. “Colgaría las perchas” para coger la cámara y no saltarla más… 

… y sigues enganchada.

Mi proyecto actual es la fotografía. Estoy al 100%. De todas formas, como comentaba, todo conduce a algo, yo solo estoy en el camino y estoy descubriéndolo. No me he puesto ninguna meta final de vida, solo apostar y disfrutar con lo que hago viviendo de ello. Si algo deja de ilusionarme y me marchita, lo dejo.  

¿Y cómo cargas las pilas para que te rebose la creatividad de ese modo?

 «Mucha inspiración la encuentro en el momento en el que piso un aeropuerto»

Pues volviendo a lo de antes: juego a ir de boda, a las profesoras, a las vendedoras y al escondite. Para desconectar del mundo voy a ver a mis sobrinos. Es mi mejor antiestrés . Un chute de amor y energía por vía intravenosa.
También escucho música, procuro leer y hojear muchas muchas revistas. ¡¡No caben más en mi casa!! Tengo pilas y pilas de revistas. 

He observado también que mucha inspiración la encuentro en el momento en el que piso un aeropuerto, cuando viajo es como si me encendiesen y me pusiesen en modo “CREATIVE: ON” 

¿Qué llevas en la cabeza?

Siempre he sentido predilección por estar sola. Disfruto mucho de los momentos de soledad. Pienso mucho en lo que me hace feliz, en lo siguiente que me gustaría hacer, en cómo puedo conseguirlo, pienso en todo lo que me gustaría hacer y no hago (como leer millones de libros o viajar sin parar). 

También pienso en lo que me frustra, en si hay algo que puedo cambiar. También me descubro pensando en tiempos pasados, inclusos en momentos del presente que ya añoro que se esfumen… Soy una nostálgica. Me encanta. 

Lugares para perder a Lala

«¿Un sitio? Todos en los que todavía no he estado.»

Pero ahora mismo me teletransportaría a un lugar con sol, una terraza al mar. Huele a café. Estaría desayunando con un vestido liviano veraniego, aunque el calor todavía no es sofocante. El cielo es azul y no se ve ni una nube. 

(Teniendo en cuenta que esta entrevista la hacemos antes de irte a Sindey, y el invierno de aquí, te hacemos teletransportada a ese sueño. Aunque te sabemos bien.)

Selecciono fotos. Una editorial preciosa que pronto saldrá publicada en una revista impresa. Además, acabo de recibir una llamada para hacer esa campaña de publicidad que tanto esperaba… En ese lugar en el que estoy hay mucho trabajo y estoy donde quiero. 

¿Cómo interpretas nuestro claim, «lo bello y lo útil»?

Bello es emocionarse. Bello es llorar por ver un atardecer o un cielo bonito. Lo bello no es el atardecer, sino lo sincero que es el sentimiento de emocionarse. 

Útil es un modo de vida. Entendiéndolo como “ser práctico”. Todo (o casi todo) lo que hacemos debería ser beneficioso para nosotros y/o el resto. Habría que hacer de nuestras experiencias y momentos algo provechoso. 

Deberíamos valorar lo útil y bello que es dejarse emocionar. 

Para mí, belleza son los días largos de sol, el picor del sol en las piernas, un baño en una piscina, una fotografía, que tu sobrino te eche los brazos, una nota sorpresa diciéndote que te quieren… incluso reflexionar sobre esto es bello.
Y útil.   

Materialismo o no, cosas «que te pertenecen» y no sueltas nunca

1. Mi perfume. No sale de mi bolso. Y si por cualquier razón se me olvida, vuelvo a por él. Es mi olor. ¡Es imprescindible! 

2. El móvil. Desgraciadamente. 

3. Mi colección de revistas: me aportan inspiración, imágenes, referencias…muchas veces la mejor inspiración no viene de las tendencias, si no de lo pasado. 

4. Guardo bastantes “mierdas” (con perdón) pero que tienen una fuerte carga sentimental. Entradas de cine, conciertos, exposiciones… Tengo una agenda donde voy pegándolas. 

5. Un par de cámaras analógicas que me han regalado recientemente, son joyas.

Buen gusto tienes, pero ¿tienes gusto?

¿Un aroma?  El café.
¿Un olor?  Cloro, olor a piscina. Me teletransporta a mis veranos en el pueblo.
¿Un sabor?  Una limonada en el dinner Fred 62 (fred62.com) que me lleva directita a Los Ángeles.
¿Una imagen?  Una palmera. Las palmeras crecen en lugares cálidos, como playas. Todo me lleva al verano. Me gusta el calor. Soy una lagartija.  

¿Y de leer, escuchar y ver?

Mis elegidos dependen mucho de la época en la que me encuentre. Y tengo muchas canciones favoritas… ahora pensando por ejemplo, nunca me cansaré de escuchar: “Rosa de Lima” de Joaquín Sabina o “Il cielo in una stanza” de Mina, volvería a leer la Autobiografía de Helmut Newton, su vida es fascinante. Nunca me cansaré de ver cuadros de Sorolla (¡qué genio!) o Sally Swatland. Y siempre lloraré con Cinema Paradiso de Giuseppe Tornatore.

¿Tú cuánto Loff.it?

Soy Loff it, por supuesto. 

Me encanta vuestro buen gusto. No es común tener buen gusto por lo culto, lo bello, lo exquisito, que no siempre tiene porqué ser caro y lujoso. Me encanta la gente con buen gusto. 

Pues gracias, Lala. También a nosotros el tuyo. Y tu alegría, vitalidad y sentido del humor. Y esa profesión que llevas dentro tan intensa y excepcional. Nos encantas tú. Y gracias, que con todo el mundo que tienes por delante vas y te paras a contestar impertinencias. Aunque no te hemos hecho «la pregunta» porque ya sabemos que «oficialmente no«, (cosas nuestras, querido lector).


Puedes encontrar a Lala, junto a su socio, nuestro también querido Oliver Pedrosa, en:

Web: lalaserrano.com
Instagram: www.instagram.com/lala.serrano/
Twitter: https://twitter.com/lalaserrano_
Linkedin: https://es.linkedin.com/in/lalaserrano

Society

El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.

Newsletter

No te pierdas nada, que saber no ocupa lugar.