Una película de comedia negra: Calvary.
Una comedia negra de pueblo irlandés con regusto amargo y fordiano.
James Lavelle (Brendan Gleeson) es el sacerdote de un pequeño pueblo irlandés. A pesar de estar convencido de que el mundo puede ser un lugar mejor, ni siquiera entre sus parroquianos puede lograr que reine la armonía, enfrentados entre sí y con el mundo por toda serie de rencores y enfrentamientos. Y también con él, extremo que comprueba cuando alguien en el confesionario le declara que tiene la intención de asesinarle.
Es posible que si el insigne John Ford siguiera vivo, o si su fantasma pudiera hacer películas (vaya usted a saber, las ciencias adelantan que es una barbaridad), de sus manos saliese algo parecido a esta Calvary, como una especie de retorno al Innisfree de El Hombre Tranquilo, donde el costumbrismo y la mala leche moderada se hubiera transformado en una ira descontrolada pero soterrada hacia el mundo que nos ha tocado vivir. Y la fe, esa fe irlandesa tan «fordiana», ya no fuera un elemento que guarda y guía el conjunto, si no un elemento más distorsionador, con sus propios y sus graves, muy graves pecados.
Claro que decir Ford es mucho decir, y es seguro que Calvary no es una obra maestra, ni siquiera completamente redonda. Pero si es valiente y habla de cosas de las que es complicado hablar, como de lo que verdaderamente es la fe, o de lo que significa ser bueno en este mundo que nos suele parecer tan malo. Y además, está Brendan Gleeson, que no es John Wayne, pero al que con absoluta seguridad John Ford le habría dado más de un papel en sus películas.
Título original: Calvary
Año: 2014
Duración: 100 min.
País: Irlanda
Director: John Michael McDonagh
Guión: John Michael McDonagh
Música: Patrick Cassidy
Fotografía: Larry Smith
Reparto: Brendan Gleeson, Kelly Reilly, Chris O’Dowd, Aidan Gillen, Domhnall Gleeson, David Wilmot, Dylan Moran, Marie-Josée Croze, Killian Scott, Isaach De Bankolé, M. Emmet Walsh, Pat Shortt, Gary Lydon, Orla O’Rourke, Owen Sharpe, David McSavage, Michael Og Lane, Mark O’Halloran, Declan Conlon, Anabel Sweeney