Un puñado de irresistibles biográficas canciones compone el debut de Moses Rubin. Vídeo, letra e información.

Dice Moses Rubin que este disco que acaba de publicar se podría definir tanto como un “estreno culminante” como un “punto final de un comienzo”. Probablemente sean ciertas las dos cosas, ya que es el primer LP de este músico madrileño y también la culminación de un larguísimo proceso que costado meses de planificación, duro trabajo, una incesante actividad y múltiples quebraderos de trabajo. También es verdad, como él mismo reconoce, que ha sido un tiempo de mucha ilusión, toda la que le ha acompañado durante el primer año de preparación de este proyecto que surgió en su retiro en Leeds, al norte de Inglaterra.

“Subtle Atmospheres”, que así se titula este sobresaliente primer trabajo discográfico de Moses Rubin, contiene ocho buenas canciones de pop clásico, con raíces en los setenta principalmente, una década en la que el rock en muchas ocasiones servía como soporte para armar potentes melodías de pop y de folk pop. Representa, según su autor, la historia de su vida reciente, algo muy significativo para un veinteañero como él. Es un resumen de todo lo que ha sucedido en su existencia desde que en noviembre de 2008 y con sólo 17 años, al parecer, se colara en su cabeza la melodía de “D Woman”, el corte que cierra el álbum. Ese fue el punto de arranque de un relato se cerró hace tan sólo unos meses cuando terminó de escribir “Friday”, otro de los temas del LP.

Tras una campaña en Verkami para conseguir la financiación, el disco se grabó en los Estudios Reno y en El Invernadero entre febrero y marzo de 2016 con la producción de Martí Perarnau y de Ramiro Nieto, un excelente músico que formó parte de los inolvidables The Right Ons. Perfectamente acompañado por una serie de excelentes músicos, Moses Rubin ha dado salida a toda la música que ha ido almacenando en su cabeza desde que un buen día, con apenas cinco años, escuchase en el radiocasete del coche de sus padres una cinta con el disco “Help!” de The Beatles. Desde entonces, a aquellos sonidos que causaron una absoluta fascinación se fueron sumando Bob Dylan, The Kinks, Eric Clapton, Donovan o Simon & Garfunkel. Los sonidos de los setenta están siempre muy presentes en su música, marcando ese carácter que tienen sus canciones, que en algunos momentos recuerdan también a The Band, por su compacta elaboración, a Cat Stevens (mucho), por la forma en que la instrumentación no sólo arropa la melodía sino que también contribuye a crear el alma de la propia canción… Pero Rubin es hijo de su tiempo y aunque el poso principal de sus influencias sean de hace ya varias décadas, lo cierto es que el resultado final es plenamente actual, un folk rock o folk blues con barniz de pop que se asimila completamente a lo que hacen otras bandas, quizás de mayor renombre pero no de mayor talento, en estos momentos, como Fleet Foxes, Iron & Wine o similares.

Uno de los mejores discos del año publicados en España. Mención especial para la portada, francamente bonita, obra de Cecilia González. El videoclip de la canción “The Rain” recoge una sesión en directo en El Invernadero filmada por Ion Elicegui  y Daniel Sagastume el pasado 27 de octubre. La banda que acompaña a Moses Rubin, que canta y toca la guitarra solista, está formada por Germán Salto, guitarra de doce cuerdas y coros, Sergio Valdehíta en el órgano Hammond, Lete G. Moreno a la batería, Rodrigo García en el bajo y David Velasco con la guitarra eléctrica y coros. Una formación compuesta por un puñado de músicos muy solventes que engarzan un sonido realmente sólido y compacto. Una banda como para sentirse muy orgulloso.

Moses Rubin presentará este nuevo disco en concierto:

Jueves 1 de diciembre, sala Costello Club, calle Caballero de Gracia, 10, Madrid. 21:30 horas. Entrada en taquilla 8 euros, entrada anticipada 6 euros y entrada anticipada con CD, 12 euros en www.notikumi.com.

I did choose and nearly loose
But I rather changed my hue
To the drenching grey skies and the puddle zoo
Such a northern point of view

With the rain

Days were gone behind a bar
Always someone bossing around
Often watching ladies as they sipped their wine
While I felt like nothing there was mine

But the rain

Loosing time and loosing touch
Expectations, frozen bows
People asking questions ‘bout a changing smell
While the freedom potion kindly fell

It’s the rain
The rain, yeah
The rain

Nothing changes, nothing lasts
Such a parenthetical past
Often jumping fences, never yielding at
Some offences that may be washed

By the rain
The rain, yeah
The rain.