Saul Bellow llevaba el ser cosmopolita impreso en sus genes: nació en Quebec en una familia judía de origen ruso y vivió en Estados Unidos desde sus escasos 9 años; más tarde vivió también en Europa tras haber obtenido una beca de estudios; participó en la II Guerra Mundial y se casó hasta cinco veces pero, indudablemente, lo que ha hecho su nombre un inolvidable de las letras ha sido su obra tal y como atestiguan tanto el Pulitzer como el Nobel de Literatura que recibió en 1976.
Bellow viajó también a Israel y, tanto los lugares del mundo que visitó en sus viajes como el entorno en el que pasó la mayor parte de su vida, Chicago, se ven reflejados en su obra, de hecho uno de los aspectos más destacados de sus producción literaria es su reflejo y análisis de la sociedad contemporánea, este hecho fue así destacado entre los motivos que llevaron a la Academia Sueca a concederle el Premio Nobel de Literatura.
Impensable hablar de un literato y no recomendar al menos una de sus obras, con Bellow no es fácil porque si eres amante de la literatura de corte costumbrista y humanista llevada al S.XX, te apasionará su obra al completo pero El legado de Humboldt es indudablemente un buen comienzo y una obra imperdible de la literatura universal.
El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.
Abogado, doctorado en ciencias políticas y presidente número 28 de Estados Unidos, Woodrow Wilson nació en Staunton, Virginia, el 28 de diciembre de 1856. + ver