Hombre culto y de férreas convicciones, amante de la libertad y defensor convencido de una idea de sociedad que conjugaba la rectitud moral con la belleza. Friedrich Schiller nació en el seno de una familia acomodada -su padre era cirujano militar- que le impidió estudiar teología como era su deseo y, en lugar de eso cursó estudios de cirugía y derecho además de iniciar carrera militar.
Era cirujano mayor cuando en 1781 publicó su primera obra, un drama antiautoritario que demostraba que la férrea formación recibida no había minado sus convicciones personales, fue depuesto de su cargo y se le prohibió escribir textos que puedieran atentar contra el orden social.
Pero Schiller era un hombre fiel a sí mismo, se trasladó dentro de Alemania en varias ocasiones por temor represalias porque tanto en las revistas que fundó -una de ellas con Goethe- como en su obra poética y teatral mantuvo la defensa de sus ideales. Sus primeras obras resultan más efervescentes y exaltadas mientras, llegada cierta madurez personal y literaria, esa exaltación se ve en cierto modo calmada, no así sus ideas que se mantienen intactas.
Defendió con pasión la revolución francesa pero le impresionaron sus consecuencias inmediatas y se refugió en el estudio de Kant.
En el mes de noviembre de 1785 Schiller publicó la primera versión de un poema que está considerado hoy, parcialmente, herencia espiritual de la humanidad y como tal está registrado en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO; se trata del poema ‘A la Alegría‘, utilizado en parte por Beethoven en la parte final de su sinfonía nº9 que es además el himno de la Unión Europea.
En sus últimos años se dedicó principalmente a su obra teatral, sus piezas son todavía hoy habituales en las representaciones de los teatros de Alemania y es que está considerado, con Goethe, como uno de los grandes dramaturgos alemanes de todos los tiempos; Guillermo Tell es una de sus obras más populares y Demetrio, inacabada, la última de todas ellas.
El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.
Abogado, doctorado en ciencias políticas y presidente número 28 de Estados Unidos, Woodrow Wilson nació en Staunton, Virginia, el 28 de diciembre de 1856. + ver
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