Radiomir Panerai, para ver sin ser visto.
El origen de la luminiscencia de los relojes tras Panerai y el Radiomir.
En octubre de 1935, Italia invadía Etiopía, la cual fue formalmente anexionada al África Oriental Italiana en mayo del año siguiente. La promulgación de sanciones por parte de la Sociedad de Naciones, así como la amenaza de cierre del Canal de Suez por parte del Reino Unido y el cerco del Mar Mediterráneo evidenciaron la clara inferioridad naval de Italia.
En ese contexto, los tenientes Teseo Tesei y Elios Toschi, del Grupo Submarino de la Spezia, se propusieron desarrollar una unidad de combate peculiar: el objetivo era crear un aparato que permitiera forzar los puertos enemigos y destruir el máximo tonelaje posible al menor coste, dados los precarios medios de su Armada. El prototipo, denominado Siluro Lenta Corsa, se fabricó utilizando un viejo motor eléctrico de ascensor, torpedos en desuso y algunas piezas de madera. Las pruebas que se hicieron con él resultaron un éxito, pero resultaba esencial que los buzos dispusieran de una instrumentación visible en la más absoluta oscuridad, ya que las operaciones a realizar serían nocturnas y en las sucias aguas portuarias. Por ello, el gobierno italiano decidió recurrir a la empresa florentina “Officine Panerai” que ya era proveedora de la marina y que, entre otros, producía dispositivos autoluminosos para el control de tiro nocturno. Esto se conseguía mediante un sistema patentado en 1915 por la propia marca como “Radiomir”, consistente en una mezcla que incluía sales de Radio, un elemento enormemente radioactivo.
Combinando la caja de un Rolex, un dial en sándwich y un bisel aumentado, lograron producir el primer reloj submarino luminoso.
Presentado en la feria Watches & Wonders del pasado mes de septiembre, los Radiomir Platino 47mm y Oro Rosso 47mm muestran un bisel dodecagonal que recuerda al primer modelo con la inscripción “Officine Panerai Brevettato” de 1938 -inscripción que permanece en el fondo roscado-, corona redondeada y cristal de plexiglas. Dispone de un cristal posterior para poder contemplar el calibre OPXXVII, un precioso movimiento de 18 rubíes con una reserva de marcha de más de dos días.
Las únicas 200 unidades que se fabriquen estarán disponibles en caja de platino u oro rosa (100 respectivamente), esfera y correa de cocodrilo negras y manecillas de oro rojo.
Contundente pero elegante, clásico y a la vez con un notable toque vintage, esta última creación de la marca mantiene el inconfundible diseño italiano con ese aire retro que tan atractivo resulta en algunos complementos. Y con la exclusividad que representa conocer el limitado número de unidades fabricadas…
Características comunes:
Movimiento mecánico manual OP XXVII con contrapeso Glucydur y reserva de marcha de 55 horas. Horas, minutos y pequeño segundero a las nueve. Cristal trasero de zafiro, frontal de Plexiglas. Resistente a 5 atm. Pulsera de cocodrilo.
Más información Manufatura Officine Panerai