Hace un año que Davide Cerrato (ex de Tudor) llegó a la casa de la estrella para imprimir un sello deportivo y contemporáneo a las familias relojeras de Montblanc. Aunque su creatividad ha alcanzado a todas las líneas, su firma se afianza en la prometedora colección TimeWalker que en el SIHH se ha mostrado en toda su magnitud.
La Colección TimeWalker simboliza el espíritu de las carreras y presenta una línea de nuevos relojes profesionales de corte Vintage que combina rendimiento, innovación, gran legibilidad y robustez para el hombre actual y que ha tomado como fuente de inspiración la extraordinaria historia de cronometraje de Minerva. La colección se compone de estos cinco modelos.
Todos son herméticos hasta 100 metros y han sido probados por el Montblanc Laboratory Test 500 simulando el uso real durante más de 500 horas.
Su caja de titanio de 50 mm, inspirada en el famoso cronómetro Rally Timer, ofrece la posibilidad de transformarse en reloj de bolsillo o de cuadro de mandos. Este cronómetro monopulsador de cuerda manual se inspira en el calibre Minerva 17.29 desarrollado en la década de 1930.
Cronógrafo que mide el tiempo transcurrido hasta en y cuyo movimiento de alta frecuencia cuenta con dos patentes y 22 patentes auxiliares. Se presenta en caja de titanio de 46,4 mm, monopulsador de titanio a las 12h y bisel fijo de cerámica negra.
Se presenta en caja de acero satinado y bisel de cerámica negra brillante de alta tecnología. Cuenta con un segundero rojo central del cronógrafo con la punta esculpida en forma de flecha Minerva.
Su caja de acero de 41 mm combinada con el bisel negro giratorio unidireccional de cerámica negra brillante y permite al usuario tener, si lo desea, una segunda zona horaria.