Relojes joyas Dior Horlogerie estalla con el color.

La casa y los jardines en los que jugó Christian Dior durante su juventud y adolescencia forman una biblioteca infinita repleta de recuerdos e historias que la directora artística de Dior, utiliza para dar vida a relojes y joyas espectaculares. Su estilo romántico y encantador es asombrosamente inspirador. La nueva colección de relojes D de Dior Granville despliega la rica paleta cromática de este paraíso ubicado en la costa normanda francesa en el que vivió el fundador de la lujosa maison. En su jardín de mil colores, el pequeño Christian Dior pasaba horas jugando y en este rincón tan especial, Victoire de Castellane ha encontrado de nuevo a su musa. Todavía suenan los ecos de los festivales de Carnaval que se celebraban en él y sus colores desfilan ahora por los nuevos relojes de espíritu joyero que miden el tiempo con el savoir-faire relojero suizo y se impregnan de audacia creativa.

La colección D de Dior Granville está formada por nueve relojes que arropan a las horas en oro blanco, amarillo y rosa. Esta línea de relojes es también un homenaje a la juventud del célebre modisto francés, el alma eterna de la firma. El color estalla en la caja en cuyo bisel se acurrucan las piedras preciosas: rubíes, turquesas, tsavoritas, zafiros rosas o amarillos, esmeraldas… los colores de las gemas son solo una pincelada en un cuadro en el que la esfera y la pulsera compiten también por llamar la atención. Las esferas en piedras naturales celebran la alegría con tonos turquesas, verdes, con el brillo del jade, el acabado iridiscente de la madreperla… y las pulseras brillantes, de piel de cabra “espejo”, buscan también su protagonismo contrastando con el resto de las tonalidades o matizando su color para mimetizarse con la esfera.

Equipados con un movimiento de cuarzo, los relojes D de Dior Granville están disponibles en tres tallas: 19, 25 y 38 mm y además del tamaño y los colores, los relojes presentan otro elemento que los diferencia puesto que en los relojes más pequeños, los Mini D de Dior, la esfera no tiene ningún indicador de las horas y son las agujas, aunque discretas, las que concentran toda la atención; los relojes de 25 mm tienen cuatro diamantes a modo de índices y, por último, los relojes D de Dior Granville de tamaño más grande tienen un diamante para señalar cada hora.