Mercedes AMG Roof Box: con la casa a cuestas, sí, pero con mucho estilo.

Lo de viajar en familia está muy bien pero a veces hacerlo en coche es algo así como un suplicio porque ni los más ordenados y organizados consiguen que todo quepa en el maletero ¿solución? un cofre de techo… Este es el momento en el que unos se llevan las manos a la cabeza, otros gritan un ¡no! rotundo y algunos más ponen cara de espanto porque, por regla general, además de que estéticamente no suelen ser bellos, los cofres de techo suelen afectar a la conducción aumentando la resistencia y el nivel de ruido dentro del vehículo. Claro que no todos los cofres de techo son iguales, el Mercedes AMG Roof Box, por ejemplo, difiere muchísimo de otros cofres de techo.

De diseño elegante y aerodinámico, con aleta negra brillante y difusores que minimizan tanto la resistencia como el ruido que supone conducir con un cofre de techo sobre la cabeza, se presenta en dos versiones (una general para todos los vehículos y otra específica para coupés) y lo hace con el logo AMG bien visible en varios lugares del cofre porque, si hay que llevar un cofre de techo se lleva (funcionalidad manda) pero se lleva con estilo y distinción.