88.000 euros por el Omega de oro de James Bond.

Si hay algo que ha acompañado al mismísimo James Bond en cada una de sus misiones privadas, desde que en 1995 se estrenase Goldeneye, ha sido un estilo exquisito y su inseparable OMEGA Seamaster. Una película que suposo el inicio de una colaboración en base a la elegancia y sofisticación y que, en pleno 2014, se ha convertido en la inspiración de un nuevo modelo de la marca de relojes con el que celebrar su 50 aniversario.

Seamaster Aqua Terra es un reloj único en su especie, con una explosión de oro amarillo de 18 quilates, material con el que también se ha creado la esfera y las agujas cubiertas con Super-LumiNova, que se presenta con un brazalete a juego. Además, OMEGA no ha querido dejar de lado al agente secreto más famoso y atractivo del mundo, haciendo un guiño hacia su personaje en el segundero central, con un contrapeso hecho a mano con el icónico logo de 007.

Y si el exterior es digno de convertirlo en un tesoro para los amantes del tiempo, su interior no es menos: equipado con el Calibre 8501 Master Co-Axial, este singular modelo cuenta con un rotor y un puente, también fabricados en oro amarillo de 18 quilates, con un mecanismo automático que ofrece un rendimiento de cronometraje extraordinario y, además, resiste a campos magnéticos de más de 15.000 gauss.

Una creación que no podía dejar indiferente a nadie, de ahí que se convirtiese en el objeto de mayor éxito de una exclusiva subasta online organizada por Christie’s, una de las casa más famosas en todo el mundo, en la que se vendió por cerca de 88.000 euros (106.000 francos suizos) superando en hasta ocho veces el valor estimado del reloj. Una cifra que pudiera parecer justa si lo que pretendemos es convertirnos en el mismísimo James Bond…