10 películas para una Feria del Libro
Una selección de la mejores creaciones del séptimo arte con origen en una obra literaria.
Son innumerables las ocasiones en las que libros y películas van de la mano. Ya sean obras maestras o libros de calidad discutible, el cine se sirve de la literatura como una de sus principales fuentes de inspiración. A su vez, el hecho de que un libro sirva de punto de partida a una película es un acicate para que sus ventas sean mayores.
Existe una regla no escrita por la cual la mayoría de los lectores habituales tienden a preferir el original literario a su adaptación cinematográfica. Nuestra imaginación recrea personajes, paisajes y situaciones de manera más satisfactoria y cercana que cualquier director. Y suele empeorar cuanto más nos gusta el libro. Cuantas veces hemos visto una película adaptada de una de nuestras novelas favoritas y se nos ha torcido el gesto porque algún personaje no cuadra con lo que habíamos imaginado o el guión añade o resta algo que ni por asomo encaja con lo que nosotros teníamos en mente.
Sin embargo, puede que la excepción (o más bien las excepciones) confirme la regla. Hay un buen puñado de adaptaciones literarias que se han convertido con el tiempo en obras maestras, colmando de satisfacción tanto a los lectores como a los espectadores. Películas que incluso superan con mucho a sus fuentes, incluso dando a los personajes la imagen definitiva que tendrán para siempre. Como olvidar a Brando como Vito Corleone, Anthony Perkins como Norman Bates, a Jack Nicholson en Alguien voló sobre el nido del cuco o a Barbara Stanwyck en Perdición. Aquí tenéis una selección de la mejores películas del séptimo arte con origen en una obra literaria.
El Padrino (Mario Puzo, 1969 / Francis Ford Coppola, 1972)
Para muchos, la mejor película de la historia del cine y, desde luego, la obra cumbre de Coppola. Y una adaptación fiel de la novela de Puzo, con unos personajes que parecen sacados de nuestra propia mente al leer la historia. Inolvidable.
El Arca de Schindler (Thomas Keneally, 1982) La lista de Schindler (Steven Spielberg, 1993)
La novela de Keneally, ganadora del prestigioso premio Booker, dió paso al Oscar a la mejor película en su adaptación cinematográfica, afirmando así el valor intrínseco de la historia del industrial alemán Oskar Schindler.
Rita Hayworth y la redención de Shawshank (Stephen King, 1982) Cadena Perpetua (Frank Darabont, 1994)
Una novela corta de Stephen King, que además marcó su primera desviación del género de terror, se adaptó para el cine en una película que ha ido creciendo con los años y el boca a boca, hasta situarse en lo más alto.
Pacto de Sangre (James M. Cain, 1943) Perdición (Billy Wilder, 1944)
Un crimen real del año 1927 sirvió de inspiración para las ocho entregas en las que dividió Cain su novela, y que luego convirtieron en guión nada más y nada menos que Raymond Chandler y Billy Wilder, lo que junto a la dirección del propio Wilder, convirtió a Perdición en una obra maestra.
Senderos de Gloria (Humphrey Cobb, 1935 / Stanley Kubrick, 1957)
Más de veinte años después de su publicación, y cuando ya seguramente nadie recordaba la novela de Cobb, Stanley Kubrick se sirvió de ella para rodar uno de los más apasionados alegatos antibelicistas jamás filmados
La evasión (José Giovanni , 1956 / Jacques Becker, 1960)
El propio Giovanni participó en la fuga que se relata tanto en su novela como en la genial adaptación de Becker, filmada con actores no profesionales y con una magistral sencillez cercana en ocasiones al documental.
Ciudad de Dios (Paulo Lins, 1997 / Fernando Meirelles, Kátia Lund, 2002)
Una década utilizó Paulo Lins para completar una de las mejores obras de la literatura brasileña contemporánea que, gracias al éxito -y a la calidad- de la película de Meirelles y Lund, fue traducida a una gran cantidad de idiomas.
Wiseguy (Nicholas Pileggi, 1986) Uno de los nuestros (Martin Scorsese, 1990)
Martin Scorsese se sirvió del libro de Pileggi, una crónica real de una familia mafiosa, para elaborar junto a él el guión de esta magnífica mirada al mundo criminal, que cuenta además con su actor fetiche De Niro y un espléndido Joe Pesci.
Psicosis (Robert Bloch, 1959 / Alfred Hitchcock, 1960)
Hitchcock necesitaba una película para relanzar su carrera y eligió comprar por 9.000 $ los derechos de la novela de Bloch, adaptándola bastante fielmente para la pantalla a través del guión de Joseph Stefano y consiguiendo la que ha terminado por ser para muchos, su mejor película.
Alguien voló sobre el nido del cuco (Ken Kesey, 1962 / Milos Forman, 1975)
De las experiencias de Kesey como enfermero en el turno nocturno de un hospital psiquiátrico y de sus flirteos con el LSD y el Peyote, surgió la que es una de las mejores novelas norteamericanas de la segunda mitad del s.XX. Luego Milos Forman puso a Jack Nicholson como protagonista. No podía salir mal.
