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cerrarUna ciudad sobre ruedas.
Las viejas vías de ferrocarril abandonadas se transforman en toda una infraestructura para edificios móviles.
Cuando le comentas que nuestras ciudades están formadas por calles en las que circulan coches y personas, y edificios donde unas familias conviven con otras de forma apilada, él simplemente se queda perplejo. Él vive donde quiere y eso es más de lo que el urbanismo actual le puede ofrecer. Su vivienda rodante se desplaza a lo largo de las vías de tren de forma que el amanecer de cada día es diferente. Además él nunca viviría cerca de extraños sino cerca de su familia. Él puede ser el habitante de la nueva ciudad que soñemos algún día.
Una vía de tren puede sugerir simplemente un camino sobre el cual viajar y conectar dos ciudades. Sin embargo para el estudio de arquitectura sueco Jägnefält Milton, las vías de tren pueden sugerir paisajes, encuentros, despedidas, espacios rodantes, hoteles, poblados… una oportunidad para desmaterializar nuestras ciudades y vivir en distintos lugares con la misma vivienda. Una oportunidad para cambiar el urbanismo, soñar y construir.
La propuesta fue premiada en el concurso del plan maestro para la ciudad noruega de Åndalsnes, y usaría las vías de ferrocarril existentes junto con otras nuevas, para permitir el desplazamiento de las viviendas según las estaciones o las situaciones cambiantes a lo largo del tiempo. Además de las 100 viviendas, el proyecto incluía la construcción de un hotel, piscina, sala de conciertos, un parque y distintos espacios de uso público.
Un sueño 100% materializable en el que las viejas vías de ferrocarril abandonadas se transforman en toda una infraestructura para edificios móviles. Tal como ellos mismos comentan: “En la ciudad hay muchas zonas industriales antiguas con vías de tren en desuso. Nuestro concepto utiliza lo que ya existe, sin necesidad de grandes inversiones en infraestructura”.
Quizá ésta sea una oportunidad para pensar en comprar una de esas viviendas rodantes y dejarnos llevar. Claro que seguramente no estén a la venta y simplemente tengamos que comprar un billete para la próxima estación.