AD en formato mini.
La colección infantil de AD juega con deliciosas combinaciones de texturas, patrones elegantes y tonos naturales y suaves.
Cuando las grandes firmas comenzaron a interesarse por los pequeños cazadores de tendencias, la magia de los formatos mini inició su fulgurante carrera hacia éxito y, la verdad, no le costó apenas alcanzar la gloria pues hay que reconocer que las versiones en tamaño reducido poseen tanto o más encanto que sus espléndidos hermanos mayores.
2004 fue el año “mini” del gallego Adolfo Dominguez quien, apuntándose rápidamente a esta tendencia, lanzó su primera colección infantil. Desde entonces niños y padres han sucumbido al embrujo de sus diseños siempre sobrios y elegantes –el sello de la casa–, perfectamente adaptados al inquieto estilo de vida de los más pequeños.
Para el próximo otoño, la línea AD para niños se impregna de los últimos dictados de la pasarela jugando con los mismos patrones y texturas combinadas que hemos visto en las colecciones adultas, aunque aportando ese toque de frescura esencial en cualquier look infantil.
Así, entre los tonos naturales –piedras, perlas o beis– y los austeros marinos, se cuela toda la poesía de los colores pastel, mientras que los tules y tejidos satinados se mezclan acertadamente con denim y lana en los diseños para niña, a quienes tampoco les faltan shorts, leggins y faldas con volumen y deliciosos abrigos románticos en piel sintética. En cuanto a los niños manda el estilo urbano: vaqueros y chinos, camisetas y polos, camisas de cuello contrastado, jerséis con capucha y cárdigans como “los de papá”. ¿La estrella?, el chaquetón marinero en azul, aunque las trencas –como buenos clásicos– tratan de disputarle el pódium. Para todos, el punto es el rey. ¡Tenedlo en cuenta!
Gorros y bufandas, guantes, botas de lluvia, camperas o tipo biker completan esta colección vanguardista, refinada y muy, muy cómoda.