El lugar de Freja.

El asunto del destino nunca encontrará solución alguna. Es una de esas maravillas heterogéneas que no se decide a mostrarse de manera clara y, tal como somos las personas, se abandona ante las miles y miles de teorías que tenemos, o sacamos de la nada, sobre él.

Pero en ocasiones uno se ve en la obligación de pensar que el destino no es más que la representación de lo justo a largo plazo. Sí, y es en ese momento, en el que lo justo decide aparecer, cuando uno deja de tener culpa y razón sobre el destino y éste nos sorprende con sus originales métodos. ¿Por ejemplo? Un taxi.

Esto fue precisamente lo que sucedió en Dinamarca, cuando un agente de modelos descubrió a la que se estrenaría por todo lo alto en los desfiles de París y Milán en 2005: Freja Beha. Un taxi fue el culpable de que hoy día la modelo dulce de apariencia y rebelde de carácter se convierta en la protagonista de la campaña otoño-invierno 2012 de Zara. El lado más tierno de Beha se refleja en una serie de fotografías donde el negro vuelve a ocupar el trono. Se retoman tendencias, como los abrigos de pelo y el glitter sobre faldas. Los jerseys de ochos se mantienen a lo largo del tiempo para convivir con una de las últimas propuestas: el pantalón pijama.

Imágenes sencillas que demuestran una vez más que, al menos, el destino sitúa a cada uno en su lugar. Freja encontró el suyo hace tiempo…

Zara