Noches de blanco satén… o no.

En Lise Charmel saben bien de las posibilides del blanco sobre el blanco satén y otros lugares...

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El blanco es un clásico en el interior femenino pero no es único, es un color que se llena de matices desde su ser de todos los colores hasta zambullirse en el beige y en los rosados; y es también un símbolo de pureza e inocencia, de sensual coquetería y tímida seducción.

En Lise Charmel saben bien de las posibilides del blanco sobre el blanco satén y otros lugares, de lo que en él brillan los detalles de color o de encaje, y este año han propuesto toda una colección en la que el blanco domina en sus diferentes intensidades aun acompañándose de colores más sólidos y profundos. Es Paris Précieux.

En Paris, el romanticismo además de vestirse en blanco lo hace en encaje de Calais y en Chantilly evocando flores y coronas; es Dentelle Charnelle, la línea pensada y creada para ocultarse bajo sensuales vestidos de novia, tan única como ellos, tan secreta, tan sensual, tan bella… y tan para lucirla. El blanco más deslumbrante es el de Evasion blue, con detalles de aquel color, y el más calido el beige más romántico y floral Precious rose; en Boheme Glamour un blanco cálidos se adorna con llamativos encajes negros con remates en rojo que evoca en sus diseños, en sus corsés y sus ligueros, a la seductora lencería del XVIII. El broche de oro de las propuestas de Paris Précieux lo ponen las noches de verano, el negro y la ausencia del color; es Nuits d’été, el erotismo hecho lencería… transparencias, encajes, asimetrías y toques de color revelan el irresistible poder de la seducción parisina en negro o nude.

Lise Charmel es lencería de París, un cóctel de encanto y seducción al que te rendirás en una concesión sincera al placer y a la belleza.

Vestir

Un escaparate lleno de prendas que nos gustan a rabiar. También, avance de los diseños que vendrán, sólo vistos, de momento, en pasarelas, catálogos y showrooms.

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