Esencia Montesinos.

Desafío torero, colores, volantes, bordados… el escenario se tiñe de flores para recibir entre la exuberancia y el misticismo los cuarenta años de creación de Francis Montesinos. Durante su trayectoria el maestro ha vivido la esencia del barroco mediterráneo mirando al mundo desde la exquisitez lorquiana de un poeta en Nueva York: ahondando en lo propio para transgredir en la moda.

Iconografía, leyenda y exuberancia a las cinco de la tarde. Es la hora en la que el hombre se convierte en mito, surgen símbolos y metáforas del diseño convertido en poesía. A ellas se suman la luz y el color de Valencia como señas de identidad de una tierra, de su autor y de la “Marca España”.

En este punto emblemático de la trayectoria de Montesinos hemos querido analizar su esencia y sus aportaciones decisivas en el terreno de la moda masculina, en una sesión protagonizada por el modelo español Nacho Moratal y la fotógrafa Lidia Rubio, que interpretan  las claves de su estilo a partir de prendas vintage de sus colecciones. Acompañando a sus diosas salvajes y vírgenes del exceso, el hombre ha sido pieza fundamental en su discurso, en su propósito de sacudir los códigos establecidos y roles. Aliado del color y de la sensualidad, fue el encargado de trasgredir la emoción dormida de la otra España incorporando la falda para el hombre en los ochenta. Los estampados florales sobre camisas de voile saltaron a los bordados en todo tipo de prendas, pantalones, americanas y zapatos en una valoración de lo artesanal como esa sustancia significadora del proceso de la moda.  Ahí nace su bordado “bésame mucho”, entre ecos de bolero y rosas abiertas, que se convierte en un clásico de los códigos modernos.

La revolución llegó al traje a partir de la combinación exótica de tejidos, pantalones de gasa chiffon, camisas transparentes y americanas de popelines y patchwork, dibujos y riquezas suntuosas en cortes thai o estructuras maximizadas.

Y es así como Montesinos sigue en cada colección redefiniendo sus límites, marcando su estilo y destilando la magia ancestral de la cultura española.

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Fotografía: Lidia Rubio
Modelo: Nacho Moratal
Asistente: Gema Mascarell

Agradecimientos: Casino Algemesí, Barbería J. Villar