L’Obsevatoire de la lumière: Daniel Buren colorea la Fundación Louis Vuitton.

Dicen que Daniel Buren (Boulogne-Billancourt, 1938) cultiva el minimalismo, la abstracción y la geometría. Que juega con la luz y los espacios, integrando arquitecturas y superficies visuales de forma magistral. Cierto. Pero además lo hace a lo grande. Desde que a finales de los 80 creara las controvertidas colonnes del Palais Royal —ya se sabe que a los parisinos les cuesta asimilar los conceptos artísticos contemporáneos integrados en la bellísima arquitectura centenaria de su ciudad— trabaja sobre escenarios formidables recreando el espacio mediante efectos visuales consagrados a la raya, de hecho convertida en el instrumento de 8,7 cm de ancho propio de su lenguaje creativo.

Daniel Buren ha diseñado un proyecto grandioso, pertinente y encantador, como resultado de un dialogo real con Frank Gehry y su edificio. Su trabajo responde de forma magnífica a la arquitectura, en línea con su enfoque, que se remonta a la década de los 70, apostando por la conjunción de colores, transparencias y luz, sostiene Bernard Arnault, Presidente de la Fundación Louis Vuitton.

La Fundación Louis Vuitton (FLV), en su proyecto de apoyo y compromiso con la creación contemporánea, presenta la última gran intervención de Daniel Buren: L’Obsevatoire de la lumière (El observatorio de la luz). Un espectacular trabajo con el color y sus rayas de 8,7 como protagonistas, que muestra el edificio de Frank Gehry bajo el prisma de una nueva luz. In situ, como acostumbra, Buren crea una instalación imponente compuesta por 3600 piezas de cristal de trece colores diferentes que, alternadas con el blanco y situadas entre las doce velas transparentes de la FLV, dibujan formas misteriosas, fugaces, cambiantes, en función de la luz natural, la hora del día, la estación.

Si el poder de seducción y la audacia de la arquitectura de Gehry son incuestionables, los juegos de luces de Daniel Buren incrementan la grandiosidad de la estructura náutica de la Louis Vuitton y el impacto visual de sus hojas de cristal. Mediante su caleidoscopio gigante juega con el color, las proyecciones, los reflejos, las transparencias y contrastes, dotando a la emblemática construcción de un poderoso halo lumínico que transforma el espacio de manera radical.

De forma paralela a esta intervención artística, el BurenCirque, instalado frente a la Fundación, se prepara para ofrecer tres funciones excepcionales los días 2, 3 y 4 de junio. Igualmente se programan talleres infantiles en los que los niños entre 6 y 10 años experimentarán con las increíbles facetas lumínicas creadas por Buren, además de descubrir cómo los juegos de transparencias, opacidad y color modifican la percepción del espacio.

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Daniel Buren, “L’Observatoire de la lumière”.
Trabajo in situ. Fundación Louis Viutton
Desde el 11 de mayo de 2016