Torrijas.
Érase una vez la historia de una mujer que no sabía hacer torrijas y una vecina de ‘oscuras’ intenciones… ver
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Érase una vez la historia de una mujer que no sabía hacer torrijas y una vecina de ‘oscuras’ intenciones… ver
Érase una vez la historia de unas manos que hacían embrujos, o mejor, de unas manos que eran embrujos… ver
Érase una vez la historia de una mujer que no quería mandar ni que le mandaran, mucho menos que le mandaran callar, sólo quería ser libre. ver
Érase una vez un universo helado bello por fuera y temible por dentro… ver
Érase una vez la historia de un viaje en el tiempo entre progresos y retrocesos, entre verdades y mentiras, entre trópicos que resultaban más obscenos en los años 60 que en los 30… ver
Érase una vez la historia de una niña que descubrió que a SER se llega leyendo. ver
Érase una vez la historia de uno y mil lugares secretos que abrazaban siempre a quienes se acercaban a ellos con el ánimo de vivirlos… ver
Érase una vez una noche de luna e insomnio que, por arte de magia o de cuento, se convertía en una noche de pasión y poesía. ver
Érase una vez la historia de un hogar hecho de aromas… ver
Érase una vez una historia en la que las mentiras corrían con sus patitas cortas mientras las verdades avanzaba con sus patas largas. ver
Érase una vez la historia de niño que tenía un sueño y lo dibujaba cada día… 365. ver
Érase una vez la historia de una mujer que descubrió que ser independientes era tan importante, sino más, que ser libres e iguales. ver
Érase una vez un día como otro cualquiera y la vez diferente porque era, en realidad, el último del año. ver
Érase una vez una historia de libros y de un cambio de proveedor de ADSL, de gente sorprendente y de sorpresas inesperadas. ver
Érase una vez las mujeres en la historia según ellas mismas lo han contado… Tus maestras, si tú quieres. ver
Érase una vez la historia de un restaurante de fábula cuyo nombre, Jamón y huevos, explicaba algunas cosas importantes… o lo intentaba. ver
Érase una vez la historia de una conjura de hermanas y un muñeco de nieve al calor de una taza de chocolate y un brindis con cava. ver
Érase una vez la historia de un rincón de pensar que se transformó en los momentos de silencio de una vida. ver
Érase una vez la historia de una vida en mil retratos. ver
Érase una vez una historia en la que la realidad se desdibuja fruto de una distorsión… ver
Érase una vez la historia de un mal sueño que escondía las respuestas que había buscado durante semanas… ver
Érase una vez un cuento de domingo de vampiros, calabazas, arañas y otras criaturas de Halloween. ver
Erase una vez la historia de la vista y de algún que otro sentido, también del sentido común. ver
Érase una vez la historia de un millón de enredos que nadie recordaba como se habían hecho pero cuyo desenredo era una cuestión de vida o muerte… ver
Érase una vez la historia de las armas de seducción más traicioneras… ver
Érase una vez una historia en la que la libertad se perdía en ausencia del respeto mientras Aretha Franklin cantaba… Respect. ver
Érase una vez la historia de unas manos que movían los hilos en un confuso tejemaneje. ver
Érase una vez la historia de un día en el que no había más camino que el que discurría al borde del abismo. ver
Érase una vez la historia de un bizcocho que obligó a su pastelero a meterse en harina… ver
Érase una vez la historia de un ansia polisémica que decía a un tiempo y a la vez una cosa y su contraria. Un lío. ver
rase una vez la historia de unos retoques aquí y allá y de la realidad aumentada y disminuida, de la mentira a la que daban lugar. ver
Érase una vez una historia de terror y dolor ocurrida un triste día de verano. Ocurrió en Barcelona como antes en Madrid, Londres, París… ver
Érase una vez la historia de una desconexión. Porque a veces hay que desconectarse del mundo para fortalecer la conexión con los sueños. ver
Érase una vez la historia de un grupo de amigos que se reencontró, entre pragmatismos y sendios, tras 10 años sin verse. ver
Érase una vez la historia de alguien que quería aprender a fluir. Be Water, my friend, flow… ver
Érase una vez la historia de una vida… o de un trago espirituoso. ver
Érase una vez la historia de una palabra que quería decir dos cosas a la vez… y no estar loca. Genio. ver
Érase una vez la historia de una campana que, cuentan, tañía sola conjurando a las brujas en el arenal de Coiro… ver
Érase la vez una historia en la que la vida discurría de trampantojo en trampantojo porque nada -ni nadie- era lo que parecía… ver
El desnudo es lo que queda cuando ya no hay nada con lo que cubrirse, cuando sólo queda la realidad de uno mismo frente al mundo. ver
Érase una vez la historia de una tarde que parecía de verano y resultó ser de tormenta… seca. Calima. ver
Érase una vez la historia de una cenicienta despistada a la que que le dieron las tres después de las doce. ver
Érase una vez la historia de una ópera en Ópera, en el Madrid más bello, bajo el cielo más sorprendente, en una cálida velada de primavera… ver
Por más vueltas que daba sobre sí misma, sabía que la vida era un camino de dirección única que antes o después debería afrontar. ver
Érase una vez la historia de un tipo que aprendió a navegar a vela en lugar de huir en su motora puerto cuando el viento arreciaba. Érase una vez la historia de un tipo que aprendió a vivir. ver
Caminó sobre el suelo transparente de la piscina y descubrió que el vértigo no es más que lo que queda cuando, en realidad, ya no queda nada. ver
Érase una vez la historia de alguien que aprendió que la vida no es más que un camino de elecciones a afrontar con decisión. ver
Érase una vez la historia de una pequeña femme que miró al mundo antes de juzgarlo y definirse… ver
Érase una vez un fábula que desvela el sutil equilibrio en que vivimos… o no. ver
Érase una vez la historia de una niña cuyo nombre era el de la diosa de la Verdad… ver