Artesanos de los sueños convertidos en diamantes.

Dicen en Boucheron que detrás de cada una de sus piezas siempre hay un sueño. Puede ser el de sus maestros artesanos, que cuidan con mimo que cada una de las piedras preciosas, diamantes y engarces de sus joyas case a la perfección con el conjunto de la obra; pero también el de aquellos que admiran su trabajo. A esta pasión por convertir sueños en joyas dedica su colección L’Artisan du Rêve, que la firma considera un viaje a través del corazón de los archivos de la casa.

«Cada pieza es el eco de una inspiración, un tema recurrente de nuestra historia o el resultado del uso de una técnica particular que nos ha convertido en emblemáticos y que demuestra a la perfección nuestra energía creativa y saber hacer», explican desde esta ‘maison’. Fundada hace más de 150 años, Boucheron sigue siendo un referente en la Plaza Vendôme de París, el epicentro de la alta joyería mundial.

En la colección destacan piezas como el Bouquet d’Ailes. Este collar está inspirado en el periodo naturalista de la firma, a principios del siglo XX. De hecho, para la casa no es una joya, sino una obra de arte en la que, como un auténtico ramillete de flores, se unen esmeraldas, zafiros de múltiples colores, diamantes… creando flores y alas de mariposas.

El japonés Azuma Makoto firma otra de las grandes creaciones, el collar Serpiente Opalescente. Se inspira en el regalo que en su día obsequió Fréderic Boucheron a su esposa, una promesa de vida feliz en común simbolizada en un collar con forma de serpiente de diamantes. Makoto lo reinterpreta con el uso de nuevas técnicas e incluyendo diferentes materiales, como el ópalo o el cristal de roca, además de los diamantes. El resultado, una pieza única, sinuosa y que destaca por su belleza.

La colección se completa con otras joyas, la mayoría collares únicos de los que sólo se creará una única unidad, y siempre bajo encargo.