Elegancia italiana en los pies.
Zapato y sandalia italianos, de inspiración clásica, con el esmero y cuidado de hoy en su diseño y fabricación.
En base ocre, blanco y siena, del beige al café claro; en tacón, plano o cuñas, monocromo o bicolor con negro, rojo o amarillo, la propuesta de Max Mara para esta primavera verano es, esencialmente, elegancia italiana en los pies.
Un paso elegante que bien pudiera empezar en los 50 con un zapato de corte salón y punta afilada, tacón fino y elevado, de vestir y vestir bien, de película en blanco y negro y mitos del celuloide… para seguir su curso en los 60 y 70 con plataformas de todo estilo y condición: de la elegancia de un peep toe bicolor y cruzado a otro beige brillante y liso a juego con su bolso; junto a ellos, y un punto menos de vestir, las plataformas en cuña o tacón, lisas en café o con algún toque de color, amarillo y oro. En los 80 y 90 plano y tacón elevado a ras de suelo; en alto, elegancia suprema en beige y sensual pulsera al tobillo, en plano el desenfado de un bicolor café con blanco o rojo.
Y a partir del 2000, esta primavera, todo; zapato y sandalia italianos, de inspiración clásica, con el esmero y cuidado de hoy en su diseño y fabricación, en la calidad de sus materiales y la comodidad de su horma. Un calzado elegante y evocador, de vacaciones en Capri… o en Roma ¿acaso no imaginas tú a Audrey alejándose de Peck subida en un corte salón afilado, elevado y bicolor?