The Q: calla y dispara.

Este es el sueño de tres amigos que una noche de fiesta, en un bar, de una conversación y de una idea la de crear una cámara digital sencilla que cubriera simplemente sus necesidades, las de una generación. Esta es la realidad de estos tres amigos tras un año de definiciones, diseños, reuniones, duro trabajo, colaboraciones, búsqueda de financiación… la realidad construida sobre un mundo que desconocían, el de la fabricación de cámaras y el de los negocios. Un sueño hecho realidad.

Así nace The Q, la primera cámara social del mundo. Una pequeña cámara en la que todo está pensado para que sacar una foto y compartirla sea un proceso sencillo, suave y divertido,  de ahí su claim «Shut up & Shoot«.

The Q se conecta automáticamente por 3G o wifi al almacenaje ilimitado de theQ LAB y sube las imágenes que tomas, pero no te deja colgado si no hay conectividad y acumula mas de 1000 tomas hasta que tengas conexión. Incorpora un conector micro USB para conectarla y cargar la batería, y una ranura para una tarjeta micro SIM, pantalla TFT de 2’7 pulgadas en la parte posterior y tan solo cuatro botones: funciones, Save & Share (que te permite compartir tus fotos en tus redes sociales favoritas con un solo gesto), disparar y disparar con flash, un flash integrado en la cámara, el anillo LED que rodea la lente, que te permite tomar buenas imágenes en las peores condiciones de luz, un objetivo de 24mm y apertura de 2.4, y toma imágenes de 5 megapíxels a la que puedes aplicarle cualquiera de los nueve filtros que incorpora: Original, Blend, Royal, Ceylon, Golden Steed, Earl Grey, Wales, Breakfast y London para que puedas personalizar las imágenes antes de compartirlas.

The Q es ligera, apenas pesa 132 gramos, y mide 10 x 6’5 x 1’6 centímetros, para que te la lleves a todas partes, en cualquier bolsillo o bolso, incluso el visor está pensado para que la enganches a un llavero. Se fabrica en nueve colores: aqua, ketchup, it’s my jam, coffee-black, mostrad, berry fields, ice baby, cupcake y peppermint, geolocaliza las tomas automáticamente para que nunca olvides dónde viviste los grandes momentos de tus fotografías y para colmo es sumergible, que no sea un problema llevártela a la piscina o a la playa o a la nieve. Su precio de venta es de unos 150 euros, más que asequible, y la primera cámara estará disponible a finales de septiembre, aunque si estás soñando con una, ya puedes ir haciendo tu pedido. Sospechamos que la primera producción va a volar.